Cristina se adueñó del voto peronista y Carrió de la capital de la provincia

El escrutinio final reveló que Obeid sacó menos votos que la senadora y que Lilita se impuso en Santa Fe

Jorge Sansó de la Madrid / La Capital

Escrutinio definitivo de las elecciones del 28 de octubre último difundidas ayer por la Junta Electoral nacional de Santa Fe sumó razones al disgusto del gobernador Jorge Obeid y reafirmó el declive del radicalismo. Cristina Fernández no sólo ganó en la provincia, sacándole a Elisa Carrió una diferencia de 24.187 sufragios, sino que fue más votada que el propio mandatario, quien encabezaba en la misma boleta la lista de diputados.

   Otro dato saliente fue que Carrió no sólo hizo una excelente elección sino que estuvo a un tris de ganar la provincia, y aunque era esperable que se impusiera en Rosario, ayer se confirmó que también se adjudicó la ciudad capital por 70.035 votos contra 66.766 de Cristina y 34.108 de Lavagna. La chaqueña ganó 16 de los 26 circuitos electorales. Además la lista de diputados de Lilita fue la más votada en ciudad de Santa Fe, con 64.976 votos, contra 61.660 de Obeid.

   Para presidente, los números finales en la provincia fueron: Fernández de Kirchner-Cobos, 606.150 votos (33,82%); Carrió-Giustiniani, 581.963 (32,47%); Lavagna-Morales, 282.627 (15,77); Rodríguez Saá-Maya, 131.648 (7,35%), el voto en blanco sumó 71.029 (3,96). Para diputados nacionales: Frente para la Victoria, 586.490; Coalición Cívica (PS-ARI) 544.442; PDP, 101.695, y UCR, 85.020 votos.

   Esto muestra que 19.660 santafesinos cortaron boleta en perjuicio de Obeid. Es decir, sufragaron por Cristina pero optaron por otra lista de diputados nacionales o por ninguna. El gobernador terminó así arrastrado por los votos de la senadora y no al revés, como ocurrió con Daniel Scioli en Buenos Aires.



Pase de facturas. El dato se propaló raudo en la interna peronista. En esos corrillos se decía ayer que el corte de boletas contra Obeid habría dañado al peronismo porque a Cristina sólo la acompañó la lista de diputados que el mandatario encabezaba. También se dijo que ello echaría por tierra cualquier aspiración de Obeid de presidir el bloque oficialista en la Cámara baja en la era Cristina.

   No menos frustrante fue para los radicales santafesinos comprobar su caída en las cifras definitivas. Mientras la fórmula Lavagna-Morales obtuvo 282.627 votos llevando varias boletas de diputados nacionales; la nomina de aspirantes a ese cargo de la UCR sólo logró 85.020 votos y no alcanzó siquiera para que pudieran ocupar un escaño. En realidad no le alcanzó a ningún radical. Ni siquiera el presidente de la convención nacional de la UCR, Adolfo Stubrin, logró una banca. Stubrin acompañó a Lavagna como cabeza de una lista de diputados peronistas.

   Socialistas y aristas festejan . Curioso es el caso de los primeros. Era público y notorio que Hermes Binner no quería votar a Carrió y que estaba convencido de que triunfaría Cristina.

   Que ganara la esposa de su actual amigo el presidente, Néstor Kirchner, era además el resultado que mejor le convenía para los cuatro años que deberían compartir cada uno en su cargo.

   Un triunfo de Carrió hubiera impedido al socialista santafesino una carrera nacional por partida doble ya que la líder del ARI habría puesto mucho de sí por construir una sucesión en torno a la figura de quien fue su compañero de fórmula: el socialista Rubén Giustiniani, la contracara de Binner —dicen— en la interna del partido de la rosa.

   Pero desde las cercanías de Giustiniani, lejos de lamentarse se muestran satisfechos. Haber estado a apenas 1,35 punto de ganar la provincia equilibra, piensan, la interna socialista. l

Cristina y Lilita, las dos grandes ganadoras en los pasados comicios en territorio santafesino.