Una designación que reconforta

Al leer la nota sobre la designación del Sergio Vacca como futuro presidente de La Asociación de Industriales Metalúrgicos (Adimra), no pude dejar de emocionarme y tener el pleno convencimiento de lo exitosa que será su gestión. Lleva en los genes y en lo más profundo de su ser "la metalurgia". Su padre fue uno de esos hombres anónimos de esta tierra que hicieron patria. Trabajó en una de las primeras plantas metalúrgicas del país, los Altos Hornos de Zapla, en Palpalá, provincia de Jujuy. En ese momento no existía nada en esa localidad, y cuando digo nada, es nada. Ningún tipo de confort, ni para las familias ni para los trabajadores. Ni agua corriente ni servicios elementales. Sergio Vacca respiraba el mineral de hierro, jugaba entre la coquería y la carbonera. Por eso sé que no estoy equivocada al decir que está en sus genes y su sangre. Para muchos es un orgullo (entre los que me incluyo) saber que ocupará tan honroso cargo ya que es un reconocimiento para todos aquellos que dejaron parte de sus vidas en pos del ideal de un gran país.

Cristina Asin

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