Año CXXXVII Nº 49424
La Ciudad
Política
Economía
Información Gral
La Región
Opinión
El Mundo
Escenario
Policiales
Autos
Cartas de lectores
Mundo digital



suplementos
Ovación


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 25/03
Mujer 25/03
Economía 25/03
Señales 25/03
Educación 24/03
Salud 21/03
Página Solidaria 21/03

contacto

servicios
Institucional


 martes, 27 de marzo de 2007  
Glory, glory, Plaza Jewell
Atlético del Rosario cumple hoy 140 años de vida
La idea de los ingleses de nuclearse llegó lejos y el club se convirtió en una institución pionera en muchos deportes

El paisaje de Rosario por 1860 era apenas el de un villerío que empezaba a recuperarse de una epidemia de cólera morbus asiático, y que aún no cerraba las heridas abiertas de ver a muchos de sus hijos muertos en la Guerra del Paraguay.

Fue por ese entonces que llegaron a la zona técnicos y operarios ingleses para trabajar en el ramal ferroviario que uniría Rosario con Córdoba. Reminiscencia de la patria distante, estos súbditos británicos buscaron nuclearse para poder moverse de acuerdo a su idiosincracia. Así fueron creando su banco, el Lloyds Bank; su iglesia, la anglicana; y su escuela, el colegio inglés.

Fue así que un reducido grupo de caballeros tuvo el deseo de tener un lugar de pasatiempo que además los ayudaría a reunirlos socialmente. Así nació el 27 de marzo de 1867 el Rosario Cricket Club, antecedente directo del Club Atlético del Rosario, decana institución de nuestra ciudad que hoy cumple 140 años.

La presidencia le fue confiada al señor Harry Woods y los objetivos de congregarse y tener un sano esparcimiento se cumplieron inmediatamente.

Un terreno cedido en las calles Catamarca y Uruguay fue su primera sede. Luego, el club se trasladó a la manzana comprendida por las calles Buen Orden (hoy España), Salta, Independencia (Presidente Roca) y Jujuy, que se extendía hasta la calle Ludueña (Brown), que es donde actualmente se encuentra emplazado el Colegio Salesiano San José, hasta que en 1890 se mudaron al predio actual que fue cedido por los hermanos Carlos y Eduardo Jewell.

La actividad, más adelante, deja de ser exclusivamente de cricket y se extiende a otros deportes (también ingleses) como el fútbol y rugby, que ya por ese entonces estaban de moda en Europa.

Pero el fútbol eclipsó al rugby y la práctica de este último deporte entró en un compás de espera que terminó en 1882, cuando socios del Rosario Cricket vuelven a ponerlo en boga casi en forma regular.

Poco tiempo después los cambios empezaron a llegar. En 1884, tras una asamblea, los socios deciden disolver el Rosario Cricket para fundar el Rosario Athletic cuya actividad principal sería el rugby.

El 29 de junio de 1886, Atlético del Rosario se midió con Buenos Aires Cricket Fútbol Club en lo que fue el primer partido interclubes de rugby que se realiza en el país. El 12 de julio de 1887 se repite el evento sólo que esa vez se jugó al fútbol.

Por 1890, los socios del Rosario Athletic ya se medían con asiduidad con equipos de Roldán (donde se encontraban los almacenes ferroviarios) o Fisherton, como así también con equipos de Buenos Aires o de algún barco anclado circunstancialmente en la costa rosarina.

Los fundadores, nunca pensaron que por intermedio del club serían también pioneros del deporte. Es que Atlético del Rosario desempeñó un papel preponderante en el desarrollo deportivo de la ciudad, provincial e incluso nacional.

El desarrollo y la evolución del medio desplazaron al cricket por otros deportes y fue así que Plaza Jewell se constituyó en entidad fundadora entre otras de la Unión Argentina de Rugby, la Unión de Rugby de Rosario, Asociación Rosarina de Fútbol, Asociación Argentina de Tenis y de la Federación de Natación de la provincia de Santa Fe.

Desde siempre Atlético del Rosario fue un propulsor del deporte amateur y sus representaciones supieron de gloria tanto en el rugby, como en el tenis y el fútbol (ver aparte).

Su campo de deportes, declarado solar histórico en 1968, siempre se vistió de gala y fue el escenario de memorables acontecimientos, muchos de los cuales quedaron grabados a fuego no sólo puertas adentro sino en la historia misma de la ciudad.
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo


Notas Relacionadas
Historia del balompié

Con el rugby en la sangre

De palos y bochas

El deporte blanco en el pasaje Gould



  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados