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 sábado, 24 de marzo de 2007  
Una beba de tres meses y medio ya entró dos veces golpeada al Vilela
En febrero la internaron con un traumatismo en la cara; y hace días, con otro en la cabeza

Silvia Carafa / La Capital

El papá de una beba de tres meses y medio quedó detenido el martes sospechado de haber provocado las lesiones con las que la nena ingresó dos veces en un mes al Hospital de Niños Víctor J. Vilela. Los profesionales dudaron desde un primer momento de que la chiquita se hubiera caído de la cuna, tal como explicaron Miguel y Cintia, sus padres, de 20 y 16 años. La Subsecretaría del Menor otorgó ayer la custodia de la nena a los bisabuelos y abuelos de la joven mamá. Además, se especula que el padre, sospechado de causar las lesiones, no podrá tomar contacto con la beba. En el caso interviene el juzgado Correccional Penal de la 3ra. nominación.

"Los familiares de la mamá de la bebé, abuela y bisabuela, acaban de firmar un acta a través de la cual se les encomienda la custodia de la nena", explicó desde la Subsecretaría de la Niñez, Adolescencia y Familia, su titular, Luisa Donni. La funcionaria dijo además que en los últimos días los equipos de esa repartición estuvieron trabajando "a pleno" en este caso.

Por el momento, la pequeña aparece como una nueva víctima del maltrato infantil. Claro que en este caso la corta edad y las lesiones por partida doble que recibió, potencian la gravedad del hecho.


El ingreso
El 13 de marzo la beba ingresó a la guardia del Hospital Víctor J Vilela con un proceso de respiración irregular Los estudios que se realizaron determinaron un traumatismo cráneo encefálico y desde ese momento permanece internada confirmó ayer a La Capital María del Carmen Carradori subdirectora de ese centro de salud

Los análisis determinaron una pequeña lesión a nivel cerebral de la cual ya se repuso. Pero para los médicos resultó llamativo que la pequeña ingresara dos veces en un mes con lesiones que al menos resultaban sospechosas.

En efecto, un mes atrás, a mediados de febrero, la niña fue llevada por primera vez a la guardia del Vilela con un traumatismo facial que sus padres explicaron como una lesión que se había producido tras caerse de la cuna. El argumento no convenció a los pediatras, ya que a los dos meses y medio -tal cual la edad de la pequeña en ese momento- la motricidad es limitada.

A partir de esa sospecha las autoridades del hospital dieron intervención al grupo que se especializa en atención del maltrato infantil (Gami), desde donde se denunció el hecho ante la Subsecretaría de la Niñez, Adolescencia y Familia.

Con respecto a esa primera internación, Carradori explicó que la nena había ingresado lúcida, y que tuvo una buena evolución de su traumatismo facial. No obstante, al recibir el alta se tomaron algunas precauciones. Las mismas contemplaban que la nena quedara bajo la responsabilidad de la bisabuela de la mamá.

Según trascendió, la mamá de la joven reside en Estados Unidos, por lo que tanto su abuela como su bisabuela, todos residentes en la zona oeste de Rosario, fueron convocadas a tomar cartas en el asunto.


Reincidencia
Después de la primera internación y mientras los distintos organismos hacían un seguimiento del caso bajo la sospecha de negligencia por parte de los padres de la beba la pequeña volvió a ingresar al hospital el 13 de marzo Regresó a la guardia con un proceso de pausa respiratoria y se detectó un traumatismo cráneo encefálico detalló Carradori y dijo que unir los dos hechos que tuvieron a la pequeña como víctima no les demandó mucho tiempo

Ante una nueva lesión y por la gravedad que estaban asumiendo los hechos, tomó intervención la Comisaria De la Mujer, donde después de declarar el padre de la nena, un joven que trabaja como ayudante de carnicería, quedó detenido.

Se estimaba que la beba iba a ser dada de alta ayer, pero a última hora aún permanecía al cuidado de su mamá y de la bisabuela de la joven. Según explicó una fuente que prefirió no ser identificada, "Cintia está más cerca del padre de la nena que de las responsabilidades frente a su pequeña hija".

Ahora la custodia de la pequeña quedará en manos de la abuela y la bisabuela de la madre. El equipo interdisciplinario del Vilela reconoce al aumento de los casos que llegan a sus manos. Y un factor que lo explica es el mayor índice de detección de estos casos.
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