Quedó firme la inimputabilidad de Tulio Adorna

El trámite judicial seguido contra Tulio Adorna ya es un caso cerrado: los tiempos para cuestionar el fallo de la Cámara de Apelaciones que lo había declarado inimputable se vencieron sin que fuera apelado. Por consiguiente la resolución quedó firme y el chico no deberá responder penalmente por los homicidios de su padre y de su hermano menor cometidos el 4 de octubre de 2003 en Funes.

Hace dos semanas la Sala II de la Cámara Penal había concluido que Tulio, que hoy tiene 20 años, no era consciente de sus actos al asesinar a balazos a su padre y a su hermano menor. Con eso confirmaron el fallo de primera instancia del juez de Menores Juan Leandro Artigas que lo había absuelto ordenando, a la vez, su tratamiento psicológico.

El fiscal de Cámaras Guillermo Camporini resolvió no apelar considerando que, al menos, a Tulio Adorna lo favorece el beneficio de la duda. Ante la consolidación del fallo que lo declara inimputable, Tulio seguirá ahora bajo el tratamiento psiquiátrico que recibe casi desde la fecha de los homicidios.

Los jueces entendieron que la falta de contención, la mala relación entre sus progenitores y la personalidad despótica de su padre perturbaron profundamente al joven. Y gestaron un largo conflicto que estalló la noche en que Tulio entró al living con una pistola Bersa provista de silenciador y disparó por la espalda a la cabeza de su padre Alberto, de 50 años, y de su hermano menor Germán, de 16, quienes murieron en el acto cuando miraban televisión en un sofá.