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 sábado, 29 de julio de 2006  
Rosario 1900-1905
Viajeros del tiempo

La civilización que se impone con la pólvora y la metralla
Con el bonito lema de "Humanidad y civilización" como estandarte, flamean hoy las banderas de guerra de miles de soldados europeos, japoneses y norteamericanos sobre las pagodas chinas. Y escudadas por el clamor moral que ese lema representa, las más cultas, las más grandes, las más civilizadas potencias lanzan sus huestes a la pelea, llevando en la espalda el sello de la conquista: "La fuerza contra los derechos". Este lema es el mismo que invocó Bismark para justificar el desfile triunfal de los ejércitos alemanes vencedores por las calles de París; el mismo que Estados Unidos primero y la Gran Bretaña después, acaban de invocar en Cuba, Filipinas y el Transvaal; el mismo que quizá mañana pueda ser invocado en la América del Sud... ¡Humanidad... civilización! ¡Humanidad que se ejercita haciendo correr ríos de sangre y civilización que se impone con la pólvora y la metralla! Humanidad y civilización que reniegan y rechazan los pueblos de Africa del Sud y los chinos del Celeste Imperio como lo haremos también nosotros hasta morir el día que se emprenda la conquista de South America. Porque el salvajismo y la barbarie que dicen combatir es en realidad la desesperación con que los débiles luchan en defensa de un derecho que se pretende desconocer por la imposición de la fuerza; es el bárbaro heroísmo y el salvaje patriotismo de los que defienden el honor de su bandera y la integridad del suelo que los vio nacer, donde aprendieron a ser cultos, humanos y civilizados. América latina no debe dormir confiada en los laureles que importaron las gloriosas jornadas del cadáver ensangrentado de Maximiliano que Méjico arrojó a la Francia o los triunfos alcanzados en 1806 y 1807 en las calles de la que hoy es la perla del Plata. La fuerza solamente se resiste con la fuerza, y ya que es ley su imperio contra el derecho, aprendamos a darle cumplimiento si no queremos ver mañana ondear en las torres de nuestras ciudades la pavorosa bandera que ostenta el bonito lema de: "Humanidad y Civilización".

Nota: Del mismo modo que en la Edad Media la sociedad europea llevó a cabo sus guerras coloniales en nombre de la cruz, más tarde lo hizo en el de la "civilización" y, actualmente, en el de la "libertad" y la "democracia". Pero sin embargo este artículo parece olvidar que con la misma excusa de enfrentar la "civilización" con la "barbarie", la política oficial argentina desde mediados del siglo XIX venía promoviendo la aniquilación de los indios y la desaparición de los gauchos, a quienes también les pasó por encima "la fuerza contra los derechos".

Investigación y realización Guillermo Zinni ©
Diario La Capital 1900/1905


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