Opinión

Toco y me voy...

Luis Alberto Yorlano

Alemania, donde tendré que vivir 35 días, es un país ordenado, un pueblo disciplinado, pero difícil por sus costumbres, la manera de alimentarse y su clima tan variable. Por eso es complicado acertar con el vestuario necesario para cubrir esta Copa del Mundo. Nada que ver con los otros mundiales en los que el verano era similar al nuestro, y donde hacer la valija era cuestión de poner ropa de verano y un abrigo por si acaso. Ahora no es así. Hay que poner ropa de verano, de media estación, algunos abrigos y algo para la lluvia.

  Las cómodas indumentarias deportivas serán nuestras ropas de fajina para la cobertura de la selección. El debut será en Hamburgo a 600 kilómetros de mi búnker en Codalburg, departamento de Nuremberg. Este pueblito enclavado en plena Baviera tiene 2.500 habitantes y es la población más pequeña del mundo que tiene subterráneo. ¿Por qué elegí ese lugar? Porque a 15 kilómetros está el lujoso hotel HerzogsPark, donde Argentina estará alojada durante el Mundial. Además, estoy a una hora en tren de Munich, donde residirán las autoridades de Fifa. Y los trenes, que los periodistas acreditados no abonamos, poseen sistema de internet inalámbrico, con lo que podré enviar durante el viaje el material para Ovación Mundial.

  La alimentación será otro tema complicado. En Alemania se acostumbra una sola comida caliente por día y la mayoría la hace en el almuerzo, mientras que a las 6 ó 7 de la tarde se comen fiambres, que en este país son riquísimos, y luego antes de acostarse alguna bebida caliente y punto. Como hay 5 horas de diferencia, por los cierres de redacción, de las radios y los informativos de TV, vamos a terminar muy tarde, es decir como mínimo a la 2 ó 3 de la madrugada... y la pregunta es ¿dónde vamos a encontrar comedores abiertos? Quizá esto ayude a hacer régimen.

  Estamos listos para otro Mundial. Lo más importante para un periodista deportivo.. Y hacia allí vamos, felices, mañana por la noche desde Ezeiza a Frankfurt vía Madrid, para llegar el martes a lo que será una nueva casa y el lugar hacia donde mirará el mundo en los próximos 35 días. Hasta nuestro próximo encuentro desde Alemania, para contarles todo sobre la selección y escribir lo que ocurra hasta el 10 de julio, cuando en la pantalla del estadio de Berlín aparezca hasta Sudáfrica 2010.