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 domingo, 04 de junio de 2006  
Encontró su norte
El mendocino Pablo Mastroeni disputará su segundo Mundial con EEUU

Gustavo Privitera / Ovación Mundial

Juega para Estados Unidos, donde escribió su historia más trascendente. Aunque nació en Mendoza hace 28 años, Pablo Mastroeni disputará su segundo Mundial con la selección norteamericana. Se fue a los 4 años con su familia. “Lloraba mucho y me decía: «Abuela, no me quiero ir de acá»”, cuenta a Ovación Mundial Olga, de 81 años, quien sigue viviendo en la capital cuyana mientras él está en Colorado con sus padres Elcira y Francisco, su hermano Diego, su esposa Kelly y su hijo Gianluca (1 año). Además del fútbol, hizo una carrera universitaria.

  Se inició como lateral derecho en 1998 en el desaparecido Miami Fusion, donde estuvo hasta 2002, junto a los colombianos Carlos Valderrama y Diego Serna (hermano de Chicho), y al DT argentino Carlos Córdoba, ex Boca. En 2000 se nacionalizó estadounidense y confiesa que se siente identificado con esa nación. “Crecí en EEUU y tengo valores, principios y una perspectiva americana”, supo decir.

  Es un volante de contención con buen panorama y una pieza clave de Colorado Rapids por su liderazgo y su gran personalidad.

  En los últimos tiempos sufrió lesiones que lo marginaron, pero sigue siendo fundamental en el seleccionado estadounidense.

  Su tía Claudia, que sigue en Mendoza, lo define así: “Es muy disciplinado y cumplidor. Sabe que su carrera no es muy larga y no falta nunca a un entrenamiento. También es accesible y por eso la gente lo quiere mucho”.

  Hincha de Boca, su ídolo es Diego Maradona y su referente futbolístico Fernando Redondo.

  En 1992 regresó y estuvo dos meses en Ferro. Se probó en River, Boca y Santos de Brasil. Pero decidió regresar a Estados Unidos.

  En Japón-Corea 2002 actuó en tres de los cinco partidos que afrontó Estados Unidos, eliminado en los cuartos de final.

  Otro mendocino, su tío Marcos, lo recuerda así: “Le tocó marcar al portugués Figo, al mexicano Blanco y al alemán Ballack. Les hizo personal y puso mucha garra”.

  En las últimas eliminatorias disputó nueve encuentros. También estuvo en la Copa Confederaciones 2003 y en la Copa de Oro de la Concacaf 2003 y 2005.

  Parte de su familia sigue en Mendoza, donde su abuelo Domingo fue dirigente de Atlético Argentino. Seguirán cada partido de Pablo en el Mundial con pasión.


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Beasley y el mendocino Mastroeni en un entrenamiento en Alemania.

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