Año CXXXVII Nº 49087
La Ciudad
Política
Economía
Información Gral
El Mundo
Escenario
Opinión
La Región
Policiales
Cartas de lectores



suplementos
Ovación


suplementos
ediciones anteriores
Página Solidaria 19/04
Turismo 16/04
Mujer 16/04
Economía 16/04
Señales 16/04
Educación 15/04
Salud 12/04
Estilo 18/03

contacto

servicios
Institucional

 viernes, 21 de abril de 2006  
Los anestesistas celebran, pero también alertan por presiones a los médicos
Conmemoran 25 años de un "movimiento de dignificación" profesional, a la vez que denuncian "cobros de peaje".

Los profesionales nucleados en la Asociación Rosarina de Anestesiología conmemoran este mes el 25º aniversario de un movimiento que "marcó un hito de dignificación y jerarquización profesional y científica". Desde entonces, la Asociación Rosarina de Anestesiología logró tener una sede propia, donde sus asociados cuentan con auditorio, biblioteca y asesoramiento legal y técnico.

La entidad posee además un banco de drogas permanente con dos kits de dantroleme, una droga usada en síndromes farmacogenéticos graves y difíciles de prever, y que ofrecen solidariamente ante situaciones de emergencia a centros de salud públicos o privados.

Pero la conmemoración de los especialistas no es sólo celebratoria, sino que también llega con una voz de alerta "no sólo para los anestesiólogos, sino para el conjunto de los médicos rosarinos": el cobro de un "peaje" a esos profesionales por parte de entidades privadas que retienen un porcentaje de los ingresos médicos para financiarse gracias a "presiones leoninas".

La entidad científico-gremial que nuclea a los anestesistas, filial de la Federación Argentina de Asociaciones de Anestesiología, lleva ya 56 años en Rosario. Sin embargo, 1981 fue el año que marcó un hito en su profesión por la gestación de "un movimiento dignificador y reivindicativo, en un momento en que nadie reclamaba nada porque era plena dictadura militar", destacó el presidente de la asociación, Máximo Gaischuk.

Hasta entonces, explicó el secretario de Hacienda de la entidad, Eduardo Pérez, el anestesiólogo trabajaba a partir de lo que le daba el responsable de la cirugía. "El cirujano cobraba, y nosotros no sabíamos cuándo cobraríamos", recordó. Pero a partir de 1981, los anestesistas comenzaron a recibir sus honorarios por sí mismos.

Según relataron los directivos, esa situación les posibilitó jerarquizarse. "Y no sólo económicamente", señaló Gaischuk, sino también en aspectos profesionales que beneficiaron a los pacientes. "Por ejemplo, se avanzó con normas para que en todo quirófano hubiera un equipamiento mínimo, que hizo que dejáramos de ser los primeros demandados por accidentes médicos y quedáramos en tercer o cuarto lugar, un beneficio tanto para anestesiólogos como pacientes", dijo. Lo que, "sumado al avance de las drogas a nivel mundial, hizo que la anestesia fuera mucho más segura".


Contratos leoninos
Sin embargo, los profesionales lanzaron un alerta severo. "Ahora la lucha se abre por otros lados", advirtieron. Por ejemplo, ante el hecho de que "las entidades privadas intentan hacer firmar a anestesiólogos y el resto de los médicos verdaderos contratos leoninos, con cláusulas totalmente asimétricas", y "cobrar retenciones de sus honorarios para financiar sus déficits".

También denunciaron que muchas les exigen la desafiliación de las asociaciones federadas que los representan. Y por eso, afirmaron, "esta fecha sirve para recordar a los colegas que, con otro nombre y otra realidad, la lucha continúa".
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo


  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados