La tragedia que minó las aspiraciones de Duhalde

Maximiliano Kosteki y Darío Santillán fueron asesinados a balazos el 26 de junio de 2002, en la represión policial a un corte del puente Pueyrredón en reclamo de planes sociales, durante el gobierno de Eduardo Duhalde. Se trató de una de las primeras manifestaciones masivas convocadas por movimientos piqueteros luego de las protestas sociales que habían desencadenado la renuncia del ex presidente Fernando de la Rúa. El comisario Alfredo Fanchiotti y su chofer, el ahora ex cabo Alejandro Acosta, fueron fotografiados por reporteros gráficos y filmados por canales de televisión que cubrían ese día el corte del puente. Esas imágenes aportadas a la Justicia fueron usadas tres años y medio más tarde como principal prueba en el juicio oral. En una de esas imágenes aparecía el acusado Fanchiotti, arma en mano, apuntando contra Santillán, quien fue fusilado por la espalda después de llegar hasta la estación de trenes de Avellaneda para intentar ayudar a su compañero Kosteki, quien ya había sido herido de muerte. La represión del puente Pueyrredón, bautizada como Masacre de Avellaneda, llevó a Duhalde a adelantar los comicios para elegir a su reemplazante, luego de haber asumido la Presidencia de manera interina tras la renuncia de De la Rúa.