Un nuevo capítulo de la saga de J.K. Rowling se estrena el mes próximo

Harry Potter tuvo una dura pelea para que el presupuesto alcanzara

Mike Newell, director del filme, se quejó del límite económico que tuvo su labor

Mike Collet White- Especial / La Capital

Tenía el respaldo de uno de los estudios más grandes de Hollywood y un presupuesto que calificó como "colosal", pero el director británico Mike Newell debió luchar continuamente por dinero mientras filmaba la última película de la exitosa saga del aprendiz de mago Harry Potter.

En una una entrevista para promocionar "Harry Potter y el cáliz de fuego", Newell dijo que su experiencia no fue diferente a la que experimento en películas de menor presupuesto, en las que sentía que nunca habían suficientes fondos para terminar el trabajo.

Pero elogió a los ejecutivos del estudio Warner Brothers por darle libertad creativa y dejarlo explorar el lado oscuro del mundo de la magia en su película, basada en el cuarto de los siete libros de la serie de Harry Potter, publicados por la escritora británica J.K.Rowling.

Escenas de muerte, destrucción y un enfrentamiento en un cementerio entre Potter y su Némesis, el maligno Lord Voldemort, fueron la causa de que la película haya sido calificada como no apta para menores de 12 años, limitando su potencial en la taquilla.

"Recuerdo claramente que unos meses después de empezar el trabajo estuve sumamente enojado por la falta de dinero, no había suficiente para hacer la película correctamente y eso realmente me molestó", comentó Newell mientras espera el estreno de la película.

El director puso de ejemplo la primera escena del filme cargada de efectos especiales, en el Mundial de Quidditch, que fue objeto de acalorados debates con los productores. Finalmente, Newell logró que la secuencia se incluyera en el filme argumentado que los seguidores de Harry Potter se sentirían defraudados.

En la parte creativa, sin embargo, el británico tuvo un camino más fácil. "Warner Brothers y los productores fueron completamente extraordinarios a la hora de dejarme hacer mi trabajo", aseguró.

Newell piensa que fue elegido para dirigir la cuarta película de la exitosa serie de Harry Potter por su trabajo en filmes de humor romántico, como "Cuatro bodas y un funeral", y en otros más oscuros como "Donnie Brasco".

El resultado es una película que abarca desde las cómicas torpezas de los romances adolescentes que se suscitan mientras los alumnos de la Escuela de Magia y Hechicería Howarts se preparan para el Baile de Navidad, hasta el miedo y el peligro que despierta Voldemort cuando trata de destruir a Harry.

El director, de 63 años, describió la película de dos horas y media de duración como "una especie de intermedio entre un filme de niños y uno de adultos".

Newell no reveló el presupuesto de "El cáliz de fuego", que se estrena en la pantalla grande de la Argentina el 24 de noviembre, aunque en varios sitios de Internet se publicó que el costo de la película oscilaba entre los 130 y 170 millones de dólares.

Pero presupuestos grandes no significan mayores ingresos de taquilla. La primer película de Harry Potter, lanzada en el 2001, tuvo un costo estimado de 125 millones de dólares y recaudó 976 millones, mientras que para el tercer filme, estrenado tres años más tarde, el presupuesto fue de unos 130 millones y registró ingresos por 790 millones.

Newell, el primer inglés al frente de un filme sobre el joven mago, dijo que le gustaría dirigir la séptima y final película de la serie. El director se encuentra también en negociaciones para llevar al cine la exitosa novela del colombiano Gabriel García Márquez "El amor en los tiempos del cólera".

Aunque con una respetable carrera en el cine, Newell recibió la atención del público a partir de "Cuatro bodas y un funeral", una comedia romántica que convirtió en estrellas a Andie MacDowell y Hugh Grant, quien desde entonces parece estar haciendo el mismo papel en cuanta película realice.

Las dos primeras películas basadas en los libros de Harry Potter -"Harry Potter y la piedra filosofal" y "Harry Potter y la cámara secreta"- fueron dirigidas por el estadounidense Chris Columbus. El realizador no se desligó por completo del proyecto y en el tercer filme de la saga, dirigido por Alfonso Cuarón ("Harry Potter y el prisionero de Azkabán), cumplió las funciones de productor.

Daniel Raddcliff, en "El cáliz de fuego".