La prosperidad no llega a todos

En Venado Tuerto no hay cuidacoches, chicos de la calle, limpiavidrios ni villas. En los barrios más alejados se ve pobreza, pero no la miseria de las grandes urbes. Sin embargo, no todos reciben de igual manera los beneficios de la bonanza del campo. "La desigual distribución de la riqueza es acá más manifiesta. Esta es una sociedad chica, pero con un poder económico importante que tiene una zona periférica con grandes déficit sociales", advierte el concejal socialista Juan Moscoso.

El edil señala como otro tema alarmante el agua que se consume en Venado. "Debe ser la única ciudad del país con esta cantidad de habitantes que no tenía agua corriente y potable", afirma. Todas las casas tienen perforaciones de napas subterráneas con el riesgo sanitario que esto implica, ya que está comprobado que el agua de la zona está contaminada por la elevada cantidad de arsénico y componentes orgánicos.

Recién hace un año se comenzó a instalar la red de agua, pero todavía es poca la gente conectada (2.500 frentistas sobre unos 8.000 potenciales) porque muchos consideran que la tarifa es alta. "Debemos hacerle entender a la gente que hay que consumir agua potable, y si no lo logramos vamos a tener que hacer obligatoria la conexión a la red, porque está en juego la salud pública", enfatiza el intendente Roberto Scott.

También aparece como problemática para la región el tema de las comunicaciones terrestres. El reclamo se centra en que la ruta nacional 33 se convierta en autovía desde Rufino hasta Rosario, ya que está permanentemente saturada de tráfico, especialmente de camiones. Y el concejal radical Lisandro Enrico apunta además "a la falta de planificación desde la Municipalidad para aprovechar este crecimiento económico" y denuncia que el departamento de General López "está totalmente olvidado por las políticas públicas santafesinas en materia de Justicia, educación y salud".