Una historia paso a paso

El músico fue cuádruple platino con su disco debut

Luciano Pereyra ganó un lugar en el escenario de la música popular sin tener la mayoría de edad. A los 17 años ganó el premio consagración en el Festival de Doma y Folclore de Jesús María •99 y ese mismo año fue consagración en Baradero, otro de los encuentros más importantes del país. Al año siguiente le llegó el premio consagración en Cosquín, lo que definitivamente marcó una bisagra en la carrera de este artista nacido en Luján. Su primer disco "Amaneciendo" fue cuádruple platino al vender 260 mil unidades a caballo de temas como "Córdoba sin tí" y "Los recuerdos no abrazan", cortes de difusión de ese material debut.

El segundo disco fue "Recordándote", que vendió 100 mil unidades, cuyo tema más difundido fue "Cómo puedes vivir sin mí". A partir de allí fue designado representante latino en el jubileo 2000, lo que le permitió uno de los placeres más importantes de su carrera: cantar en el Vaticano ante la presencia del mismísimo Juan Pablo II y ante dos millones de jóvenes de todo el mundo. El tema que cantó en esa oportunidad fue "Sólo le pido a Dios", de León Gieco, que fue agregado como bonus en una reedición de "Recordándote".

"Soy tuyo" fue su tercer disco, con el cual comenzó a trabajar bajo la dirección musical de Cachorro López, el ex bajista de Los Abuelos de la Nada, conocido además por su labor de productor de Diego Torres. Este material le permitió a Pereyra realizar 10 Luna Park en menos de dos meses, lo que muestra a las claras su popularidad, ratificada en "Luciano", su último trabajo.