| | domingo, 04 de abril de 2004 |
 | ¿Podrán los reyes
No saben lo que se les viene. En realidad, no tienen la menor idea. Tal es el comentario que realizan en voz baja -ideal para esta columna- varios expertos locales en turismo acerca del impacto que tendrá en la ciudad el Congreso de la Lengua Española, planeado para noviembre. El blanco de sus críticas son, por supuesto, los organizadores, que se han demorado inexplicablemente en congelar las plazas hoteleras para esa fecha. El rumor que se instaló ayer fortalece la hipótesis de la imprevisión o la simple incompetencia: al parecer los reyes de España se instalarán en Rosario durante cinco días con motivo del evento. Y se afirma que la búsqueda de un lugar especial para alojarlos ya se ha iniciado, ya que estaría definido que por razones de seguridad y comodidad no se elegirá un hotel. Más bien, se cree que una residencia señorial o un barrio privado se convertirán en el refugio de la pareja real. Piénsese que a esta visita, tan importante, se les agregarán las de varios presidentes hispanoamericanos y se tendrá una visión de los niveles de seguridad que resultará necesario desplegar en una ciudad que no se encuentra precisamente preparada para el desafío. Eso sin tomar en cuenta el aluvión de visitantes que podría llegar a Rosario desde todas partes del país e incluso de América, interesados en asistir, y se entenderá por qué razón a algunos no les alcanzan las manos para agarrarse la cabeza.
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Humo que no
Para variar en esta Argentina, hecha la ley, hecha la trampa. El comentario viene por la recurrente avivada de muchos quiosqueros locales que ante el aumento del precio de los cigarrillos dispuesto por el gobierno han optado por el camino más corto, que en este caso se relaciona directamente con la ilegalidad. No de otra manera puede encuadrarse el acto de ofrecer cigarrillos de contrabando, que tendrían sello de Chile pero entrarían vía Brasil. En fin. Como siempre, los que se quejan de la situación son muchos, pero los que ayudan, pocos. Y los que predican con el ejemplo, menos. ¿Cuándo se controlarán mejor estas pequeñas infracciones que, sumadas, construyen los grandes delitos?
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Automovilista
La noche venía movida. Un suceso de último momento había dejado al cronista en estado de soledad absoluta y las exigencias del cierre lo desbordaban: desesperado, no sabía con qué mano encender el enésimo cigarrillo mientras con los ojos desorbitados leía a toda velocidad los cables. En ese momento sonó el teléfono. Apagando el cigarrillo recién prendido contra el suelo con gesto de nerviosismo, nuestro hombre lo pensó un segundo y tomó la arriesgada decisión: levantó el tubo. Desde el otro lado de la línea, una voz lo informó sobre un accidente automovilístico ocurrido en la zona sur de Rosario. El comentario que emitió el hombre de prensa en ese momento revela su olfato para la noticia: "¿A esta hora?". Quedó claro: en lo posible, no chocar a la medianoche, por favor.
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 | "Tenemos que sortear situaciones donde los ultras son más enemigos de los progresistas que los propios reaccionarios"
Roberto Rosúa
Ministro de Gobierno de la provincia | Ver noticia  | |
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La Ciudad
