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 domingo, 30 de noviembre de 2003

Plantas medicinales
Cómo perder peso naturalmente

Una alimentación sana nos garantiza sentirnos bien y mejorar nuestro aspecto físico, emocional y de relación con los demás. Cuando lo que comemos es rico en grasas saturadas, azúcares refinados, productos con conservantes y aditivos, o ingerimos grandes cantidades de comida, el organismo responde con sobrepeso, problemas digestivos, hepáticos, colesterol, aumento de la presión, cambio en el ánimo y fatiga, por mencionar algunos.

Según los especialistas, en un mundo ideal el apetito debería estar regulado por nuestro propio cuerpo como ocurre con los bebés. Los recién nacidos se alimentan sólo cuando tienen hambre. A medida que crecemos nos volvemos más permeables a los estímulos externos. Muchos comemos porque el alimento está disponible y tiene buen sabor o buen aspecto. Otros lo hacemos para aliviar tensiones dado que el alimento, al menos en el corto plazo, actúa como una suerte de tranquilizante. La ansiedad, el estrés, los problemas laborales, de relación, la angustia, la depresión, la soledad y la baja autoestima pueden llevar a trastornos de la alimentación y producir enfermedades tan graves como la bulimia o la anorexia.

A pesar de todos los estímulos negativos que recibimos diariamente, podemos modificar nuestro comportamiento frente a la comida. Seguidamente, algunas pautas para sentirnos mejor desde la medicina natural:

u Mirarnos con cariño: en primer lugar necesitamos verificar nuestro estado de salud actual. Un chequeo de rutina con nuestro médico de confianza y controlar el buen funcionamiento de la tiroides y el resto de las glándulas. Creer en nosotros mismos, en nuestras capacidades, en nuestro poder de modificar. Debemos identificar los momentos en que comemos en exceso, compulsivamente, y tratar de modificar la conducta. Por ejemplo, si uno sabe que cuando se sienta a mirar televisión come un paquete de galletitas dulces en media hora, propongo tener a mano para ese momento dos tostadas con queso blanco o un paquete de arroz integral inflado acompañado con una vaso grande de agua con limón. Lo importante es determinar los momentos y planificar qué hacer.

u No dejar de comer: las dietas estrictas nos llevan a dejarlas irremediablemente. Tenemos que comer menos, comer sano y comer a horario.

¿Que debemos comer todos los días?: pan integral; vegetales crudos o cocidos en ensaladas; una fruta de estación; carnes rojas o blancas magras (sin grasa ni piel); 2 vasos de leche o yogur; una porción de queso magro; 2 litros de agua sin gas.

u Que los encuentros con amigos o familiares no siempre impliquen tener que comer (en las reuniones sociales siempre comemos y bebemos de más).

u Realizar caminatas diarias: caminar todos los días media hora ayuda a despejarnos, alivia las tensiones, quema grasas, mejora la respiración y el estado físico de articulaciones, músculos y huesos. Todos los ejercicios sirven (natación, bicicleta, yoga, gimnasia modeladora). Los masajes reductores, relajantes, de drenaje linfático también son recomendables.

u Las plantas medicinales también ayudan. Para quemar grasas y combatir la celulitis y las estrías sirven la centella asiática, el hisopo, las algas marinas como el fucus (no deben utilizarlas las personas que son alérgicas al yodo) y el té rojo (no confundir con el negro).

De la centella asiática se emplean las partes aéreas desecadas y fragmentadas. Los estudios clínicos indican su aplicación en enfermedades venosas como la insuficiencia venosa crónica, las venas varicosas, la hipertensión venosa y en la prevención de problemas circulatorios en vuelos de media y larga distancia. Tiene una acción directa contra las estrías y la celulitis. Se toma el té en infusión 3 tazas al día. También viene el extracto seco en cápsulas y se acompaña el tratamiento con cremas o geles.

Para la ansiedad, el insomnio, las tensiones y el estrés, mencionaremos a la pasionaria o pasiflora o mburucuyá, la melisa o toronjil, el tilo, el hipérico, la lavanda (se usa el aceite esencial o los baños con la infusión de las flores).

De la pasionaria se utiliza toda la parte aérea inclusive flores y frutos. Está indicada en casos de intranquilidad, inquietud e irritabilidad y para conciliar el sueño. Tradicionalmente se ha empleado en casos de ansiedad. Recomendamos un té de pasionaria, flores de tilo e hipérico y hojas de melisa en infusión todas las noches.

Retención de líquidos

Muchas plantas tienen efecto diurético y mejoran el funcionamiento del aparato digestivo. Se recomienda ingerir la parte aérea de la cola de caballo, diente de león, amargón u ortiga porque son también depurativos, remineralizantes y para el colesterol; la cáscara sagrada, el sen, el salvado, para regular los intestino; la alcachofa, el cardo mariano, la carqueja para mejorar el funcionamiento hepático y la eliminación de toxinas.

La principal virtud del diente de león, amargón o achicoria silvestre es la de limpiar el organismo de agentes tóxicos; es antirreumático; activador del páncreas y del metabolismo; digestivo; estimula la producción de bilis, es ligeramente amargo, tónico y laxante suave. Como diurético es excelente porque aporta potasio y no produce calambres. Colocar en un recipiente una cucharadita de cada una de estas plantas: semillas de cardo mariano, diente de león, hojas de ortiga y cola de caballo; agregar un litro de agua; hervir 5 minutos; apagar el fuego; tapar y reposar hasta enfriar. Tomar durante el día.

Griselda T. Franchini

Farmacéutica

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Con una dieta sana se puede mantener la línea.

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