La mercadería suele descargarse a la madrugada, cuando no hay inspectores

El municipio detectó el ingreso ilegal de carne vacuna en Cañada de Gómez

La jueza de faltas aseguró que en la ciudad hay un tráfico de cortes frescos sin los controles pertinentes

Walter Gasparetti / La Capital

Cañada de Gómez. - Inspectores municipales detectaron en un procedimiento el ingreso ilegal de carne vacuna por parte de una empresa -su nombre comercial no fue revelado- con varias sucursales, algunas de las cuales no cuentan con la habilitación municipal. La irregularidad no sólo ocasiona un severo perjuicio a las arcas comunales sino también un riesgo para la salud de los consumidores.

"En Cañada de Gómez hay tráfico ilegal de cortes frescos que se ponen a la venta", denunció la jueza municipal de Faltas, Susana Jordán. La funcionaria estudia sanciones para la empresa infractora, cuya denominación no será revelada a la prensa hasta que culminen los trámites de rigor.

Carniceros que operan en forma legal efectuaron diversas denuncias sobre la descarga de carne en horario nocturno, incluso de madrugada, cuando no opera la repartición municipal que se ocupa de ese contralor. Incluso la propia Jordán admitió haber observado ese tipo de movimientos.

"El caso que nos ocupa es el siguiente: la empresa ingresó alrededor de 1.600 kilos, de los cuales sólo pretendía declarar un 60%. Es uno de los tantos casos graves que fueron observados, pero tenemos información de que existen muchos más", comentó la jueza. La infracción se labró sobre la base de una ordenanza dictada para defender el funcionamiento del matadero municipal y por la cual se aplica una tasa de 19 centavos por kilo a los cortes frescos que ingresan para ser comercializados en la ciudad. El gravamen se denomina impuesto de verificación de carne.


Irregularidades
El ingreso ilegal de carne no sólo constituye un riesgo para la salud de la población, sino también un serio perjuicio para las arcas del municipio. Pero además el procedimiento dejó al descubierto irregularidades en la propia administración pública. Es que el titular de la empresa que intentó ingresar carne en forma ilegal admitió que muchas veces utiliza el sello de la repartición municipal para autorizar el ingreso. Esta acción es llevada adelante con el consentimiento del empleado a cargo de esa función.

"Estas irregularidades se están investigando y se evalúan las sanciones que correspondan", dijo la jueza, quien a su vez diferenció el ingreso ilegal del clandestino. Este último, llamado así porque se desconoce la procedencia, no corresponde al caso detectado por el personal municipal que estuvo a cargo del operativo.

Un carnicero que prefirió mantener su nombre en reserva explicó a La Capital que todo lo que no es verificado debe ser decomisado. Cuando la carne está en buen estado se estila derivarla a entidades de bien público. Ese mismo comerciante confió que posee información sobre faena clandestina en campos cercanos. "Hay explotaciones agropecuarias que se dedican a esto -sostuvo- y hasta tienen cámaras frigoríficas. En casi todos los casos son los propios expendedores quienes viajan al campo para realizar el trabajo. Esta carne ingresa luego a la ciudad en forma solapada".

La jueza de Faltas, Susana Jordán, investiga.