Asambleas y reclamos de la comunidad universitaria

En el anfiteatro del campus universitario riocuartense se realizó ayer una asamblea interclaustro exigiendo una profunda investigación del accidente. “Los compañeros reunidos, unos 600, manifestaron su pesar y rabia por lo ocurrido, ya que quedó en evidencia el nivel de inseguridad que hay en el lugar”, dijo Jorge Aldaro, secretario adjunto de la Asociación Gremial Docente del la Universidad de Río Cuarto.

“Las autoridades plantean que no sabían la existencia de esos peligrosos tambores. Pero nos preguntamos cuánto más no saben sobre lo que ocurre en la universidad”, dijo el docente e ingeniero mecánico a La Capital.

“No se sabe exactamente que si en ese lugar se desarrollaba una investigación o servicios para empresas, como la aceitera del grupo Urquía”, denunció.

Cargan contra el rector.
La Federación de Docentes de las Universidades (Fedun) señaló ayer que el rector Oscar Spada, fue recientemente titular del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) y mientras ocupó ese cargo, “se negó a darle forma a la Comisión de Seguridad e Higiene”.

“El desarrollo universitario de biocombustibles es una muy buena iniciativa, pero la complejidad de tal emprendimiento implica la máxima responsabilidad de las principales autoridades de cada unidad académica”, advirtió la comisión directiva.

Para la Fadun “este hecho debe sentar un precedente para que las autoridades tomen conciencia de la necesidad de elaborar políticas concretas que tiendan a revertir la inseguridad laboral de los docentes universitarios”.

Una de las docentes, María Marta Reinoso, afirmó que “todos sabían que allí estaba el hexano y nadie hacía nada” y advirtió que los investigadores corren “un riesgo permanente porque no hay lugar para trabajar”.