Ratifican la sanción para los alumnos del Superior

El castigo se sostuvo. El Consejo de Convivencia para Sanciones integrado por cinco representantes de distintos claustros de la Escuela Superior de Comercio ratificó ayer la medida disciplinaria que había resuelto para cuatro alumnos del colegio que cursan el 3º año del polimodal: les aplicaron 15 amonestaciones. Así, los jóvenes, de 17 y 18 años, quedaron libres y tendrán que rendir las 14 materias de este año.

   Las madres de algunos de ellos habían expresado que la medida era “excesiva” y les coartaba la posibilidad de ingresar el año proximo a la universidad. Pero las autoridades dejaron en claro que los alumnos tendrán mesas para rendir a partir del 3 de diciembre. Si les quedara alguna asignatura pendiente y necesitaran volverlas a rendir podrían presentarse en marzo y abril, mes a partir del cual pueden solicitar mesa de examen cada 20 días. Y en caso de querer ingresar a la universidad tendrán hasta el 30 de abril para presentar en las facultades el certificado con las materias aprobadas.

   El Consejo se reunió ayer por la mañana en el colegio (Barlcarce 1240). Desde las 9.20 deliberó prácticamente durante dos horas. El encuentro entre una alumna, un preceptor, un directivo y un profesor se realizó luego de que los padres pidieran que se revea la sanción a través de cartas dirigidas al establecimiento y a la Justicia; no obstante, el juez en lo Civil y Comercial Hernán Carrillo rechazó un recurso de amparo por “inadmisible”.

   Los alumnos, tras salir de una clase de Práctica Contable una noche a las 20.15, esperaron a que se cerrara el colegio y se quedaron dando vueltas toda la noche tras decirles a sus padres que irían a dormir en la casa de uno de ellos. Comieron, hicieron caca y orinaron un pasillo y dos baños, y los inundaron. Se quedaron dormidos en la terraza, donde los encontró un ordenanza. A la mañana siguiente, una portera se lastimó un pie al intentar poner orden en los baños. Estuvo dos días de licencia y ahora se encuentra en tratamiento por un esguince.



El fallo. En dos carillas los integrantes del Consejo expresaron su fallo. Por segunda vez cuatro miembros estuvieron de acuerdo con la aplicación de las 15 amonestaciones que, al sumarse a otras seis que ya tenían los alumnos por un faltazo colectivo, los dejó libres. La alumna representante expresó en las dos ocasiones que la falta de los chicos le parecía grave pero consideraba que la pena debía consistir en trabajo comunitario (probation). No obstante, la pena se sostuvo y así se les transmitió a dos de las madres que esperaban el veredicto. Las mujeres se negaron a hablar con La Capital; adujeron que sus hijos fueron maltratados por la prensa y no se les dio oportunidad de defensa.

   “Acá es importante preguntarse qué hubiera pasado si a los chicos les pasaba algo mientras estaban encerrados en el colegio; ellos les mintieron a sus padres al quedarse acá y provocaron hechos que no pueden considerarse una picardía”, dijo la directora, Gabriela Zamboni, quien se mantuvo al margen de la sanción ya que no integra el Consejo. l