Abrió la puerta de su casa para recibir una pizza y lo asesinaron

Buenos Aires.— Un analista de sistemas de 28 años fue asesinado de un balazo en la espalda en su casa del barrio de La Paternal, por delincuentes que lo asaltaron cuando le abrió la puerta a un repartidor de pizza. El dueño de casa recibió el tiro sin ofrecer resistencia mientras en la vivienda estaban su mujer embarazada y dos hijos varones, uno de 6 años y otro de 4.

   El caso ocurrió el jueves cerca de las las 22.30, cuando Federico Edelman Anaya, ciudadano venezolano, recibió en su casa de Lascano 2353 al repartidor de pizzas que le llevaba un pedido que había realizado por teléfono. Anaya pagó las pizzas y cerró la puerta, pero a los pocos segundos sonó nuevamente el timbre y al abrir se encontró cara a cara con tres hombres que le dispararon a quemarropa.



El retorno. Según se pudo reconstruir en base a la declaración del repartidor, empleado de la pizzería “La Canastita”, cuando abandonaba el lugar, fue sorprendido por los tres ladrones, dos de ellos armados, quienes lo golpearon, le robaron la recaudación y lo obligaron a volver a tocar el timbre de la casa de Anaya. Los asaltantes le exigieron al hombre que dijera que se había olvidado algo para que el dueño de casa le volviera a abrir la puerta de calle. Entonces, cuando Anaya abrió la puerta, en lugar del repartidor se le aparecieron los delincuentes, quienes le dijeron: “Flaco, esto es un asalto, traé la guita”.

   Anaya se dio vuelta, no se sabe si con la intención de ir a buscar dinero o para intentar cerrar la puerta, y en ese momento uno de los asaltantes le disparó con su arma y huyó con sus cómplices sin robar nada. El proyectil le ingresó a Anaya por el omóplato izquierdo y le habría impactado en el corazón, por que la muerte fue casi en el acto, dijeron las fuentes consultadas.



La lechería.El médico del servicio de emergencias que concurrió al lugar convocado por la familia de Anaya no pudo reanimarlo y sólo pudo constatar que la víctima había fallecido. Testigos del hecho dijeron a la policía que los asesinos huyeron hacia el asentamiento de emergencia denominado “La Lechería”, una fábrica abandonada y tomada, situada a unas tres o cuatro cuadras de la casa de Anaya, en Caracas al 2800 y vías del ferrocarril San Martín.

   En tanto, vecinos señalaron que desde ese lugar salen delincuentes que son autores de casi todos los hechos de robo que ocurren en la zona. El jefe de la circunscripción séptima de la Policía Federal, comisario inspector Ricardo Pedace, dijo que los autores del crimen “fueron tres personajes que emplean la violencia sin razón, personas totalmente locas que destruyeron a una familia”.



“Chacales”. “La víctima era una persona como ustedes o como yo, que estaba en la tranquilidad del hogar y había pedido una pizza para comer en familia”, relató el jefe policial, que llamó “chacales” a los asaltantes.

   Por su parte, la suegra de la víctima, que dijo llamarse Mary, explicó que el joven “no se resistió en ningún momento” al robo, aunque lo balearon frente a su mujer embarazada y dos hijos. “Después de que el delivery se fue volvieron a tocar la puerta y al atender le pegaron un tiro, no le dieron tiempo a nada...solamente le pegaron un tiro, entraron a la casa y le pegaron un tiro, no robaron nada”, añadió conmovida la mujer.

   También comentó que Anaya era analista de sistemas y se había establecido con su familia en La Paternal desde hacía siete meses. “Sorprender ya no nos sorprende nada. Cuando salís todas las mañanas te enterás de que le robaron a uno, a otro y acá la policía viene cuando juega Argentinos Juniors, los tenés a todos. ¿Por qué no fueron a La Lechería? Toda la inseguridad es culpa de eso”, dijo una de las vecinas de la víctima. (Télam) l