Breves

Murió la nena baleada por el papá. Ludmila Sandoval, la nena de 4 años baleada por su papá en una casa del barrio Santa Rosa de Lima de Santa Fe, donde también baleó a su otra hijita, murió ayer en el hospital de niños de la capital provincial. El hecho se desencadenó cuando Jorge Miguel Angel Sandoval, de 25 años y separado de la madre de las nenas, le disparó un tiro en la cabeza a Ludmila y a su hermanita Micaela, de 8 años, quien murió la noche de aquel día. Tras eso, el joven huyó de la casa y poco después se suicidó de un disparo.

Apuñaló al jefe porque lo suspendió. El empleado de la carnicería de un súper hirió de una puñalada al encargado del local al enterarse de que había sido suspendido. Fue el miércoles en Ayacucho y Cerrito cuando Juan Carlos C., de 41 años, informó a Ezequiel, de 28, que se quedaba sin trabajo por 20 días por su mala conducta laboral. Entonces mantuvieron una fuerte discusión hasta que el empleado le aplicó una puñalada a su jefe y escapó. Mientras tanto, Juan Carlos C. fue derivado al Heca, donde ayer seguía internado fuera de peligro.

Joven calcinado y enterrado. El cuerpo quemado y enterrado de un joven que había desaparecido el domingo fue encontrado en el paraje Mari Menuco, a 50 kilómetros de Neuquén. Se trata de Diego Iván Becerra, de 28 años, quien se había instalado en esa provincia hace unos meses, después de que cerrara la empresa donde trabajaba en Malargüe y cobrar 16 mil pesos de indemnización. En el Fiat Uno de la víctima, que también fue quemado, los pesquisas hallaron una cadenita y un equipo de mate de su pertenencia.

Se pegó un tiro para no volver a prisión. Un joven robó una moto del delivery de un restaurante de comidas chinas, en el barrio porteño de Belgrano, pero tras ser golpeado y reducido por el dueño del comercio y ante la inminencia de ser detenido, sacó un arma de fuego y se hirió de un disparo en el cuello. Ocurrió la noche del miércoles y antes de autolesionarse, el delincuente gatilló tres veces contra el comerciante sin que salieran los tiros. Luego, se apuntó el arma al cuello, gritó “yo a la cárcel no vuelvo” y se efectuó un disparo.