Año CXXXVII Nº 49527
La Ciudad
Política
Información Gral
El Mundo
Opinión
Ovación
Policiales
La Región
Cartas de lectores



suplementos
Economía
Escenario
Señales
Turismo
Mujer


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 01/07
Mujer 01/07
Economía 01/07
Señales 01/07
Educación 30/06
Salud 27/06
Página Solidaria 27/06
Estilo 16/06

contacto

servicios
Institucional

 domingo, 08 de julio de 2007  
Ventajas de la inversión forestal

Clarisa Ercolano / La Capital

Ni un plazo fijo, ni títulos en la Bolsa, mucho menos aventurarse al negocio propio. Según los asociados que conforman el grupo Emprendimientos del Litoral, la mejor inversión para quien no necesita una liquidez inmediata por estos días, es comprarse un pedacito de bosque. Con esta idea, este grupo de empresarios locales radicados en Buenos Aires, llegó a la ciudad para tratar de captar a futuros inversores.

“Existen tres pilares sobre los que se sustenta este tipo de inversión, el crecimiento biológico, porque el árbol siempre crece y no se entera si hay avatares económicos o políticos; la evolución del precio de la madera, que se triplicó en el país; y por último el valor de la tierra”. De esta manera, el gerente de la firma, Darío Di Santo, justificó las ventajas de esta forma de inversión.

Esta compañía que dio sus primeros pasos a inicios de 2003, surgió de un acuerdo con el grupo Bapro y se dedica a comercializar cuotas parte, donde el inversor obtiene la propiedad de los árboles sembrados y también de la tierra. “Son dueños de la tierra y de la plantación”, explicó Di Santo, que definió el negocio como una inversión conservadora, con tasa de retorno del 12 al 15 por ciento anual en dólares, baja volatibilidad y muy tangible.

Los primeros frutos comienzan a verse transcurridos los primeros cuatro años y se obtiene una rentabilidad plena a los diez. “Esto cubre el espacio de la falta de alternativas para un inversor que busca seguridad a mediano y largo plazo”, aseguró Di Santo, quien agregó que el clima es propicio porque en este país el crecimiento de las especies duplica al que se da en Europa y en el hemisferio Norte. Sumado a esto, destacó que “aquí no es alto el valor de la tierra, lo que suma a la hora de invertir”.

El monto mínimo para arrancar en esta empresa son 10 mil dólares para los particulares. También hay mutuales que invierten en seguros de sus empleados o inversores que intentan administrar su propio retiro o asegurar el estudio de sus hijos. Por otra parte, estas inversiones suman puntos en el mercado de los bonos de carbono, que está en pleno auge.

Según los empresarios, la legislación vigente brinda las herramientas necesarias para el desarrollo exitoso de este tipo de emprendimientos y explicaron que la actividad foresto-industrial genera en la Argentina tres veces más puestos de trabajo que la industria automotriz en su conjunto.
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo



  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados