Una rosarina puede ser la gobernadora fueguina

"No soy dueña de los votos, se trata de la gente que decidió decir basta", dijo Fabiana Ríos, quien mañana va al ballottage contra el oficialista Cóccaro

Jorge Kaplán / La Capital

Fabiana Ríos saltó a los primeros planos de la política nacional al acceder al ballottage de Tierra del Fuego, con fuertes chances de ganarle la Gobernación al actual mandatario, el kirchnerista Hugo Cóccaro. Cualquiera sea el resultado de la elección del domingo próximo, esta rosarina radicada desde hace 20 años en las frías tierras del sur, ya ha marcado varios hechos inéditos, entre ellos: colocar al ARI por primera vez con serias posibilidades de acceder a un cargo ejecutivo de real envergadura, y en caso de ganar ser la primera mujer gobernadora electa por el voto popular.

En diálogo con LaCapital , mientras despuntaban las demoradas primeras luces del alba del día más corto del año en Ushuaia, Ríos se confesó agotada por la campaña y sorprendida por la repercusión nacional de esa elección provincial. Sin perder nunca la modestia, la actual diputada nacional describió la situación política de Tierra del Fuego, marcada desde hace años por graves hechos de corrupción, escándalos y descalabros institucionales, a lo que -aseguró- "la gente le está diciendo basta".

-¿Por qué Tierra del Fuego es noticia desde hace años por escándalos y crisis institucionales?

-La sociedad de Tierra del Fuego es genial. Esta provincia es muy rica, también muy pequeña, pero cuando me hacen esa pregunta desde el norte digo: ¿en qué se diferencian las prácticas políticas que ven ustedes en sus provincias?

-Al menos en Tierra del Fuego tienen una trascendencia pública que no se ve en otros lados.

-Salen a la luz, es posible, pero las prácticas políticas globales son muy parecidas en todo el país y responden a una manera que concluyó en Argentina en el 2001 con los cacerolazos que decían "que se vayan todos". Además, Tierra del Fuego tiene un proceso institucional muy joven, es una provincia que tiene sólo 16 años, con una Constitución muy moderna, que le otorgó a la ciudadanía derechos que aquí la Legislatura no reglamentó o en el peor de los casos los malversó.

-¿Cómo fue el paso de territorio nacional a provincia?

-Hubo que cambiar la lógica de dependencia, la práctica política de sus gobernadores, que no cambió, con un presupuesto que es muy dependiente de la Nación, tanto por regalías hidrocarburíferas como por coparticipación. Esto hace que la provincia sea sumamente vulnerable y frágil a pesar de las enormes riquezas que tiene. Sistemas presupuestarios que no tienden a la transparencia favorecen la corrupción y el desvío de fondos, porque no hay información, no hay cuentas públicas.

-¿Cómo reacciona el ciudadano fueguino?

-Hay una ciudadanía muy atenta, muy formada, muy cercana al dirigente porque te ven en la calle. Un partido político como el ARI fue de alguna manera sintetizando el ánimo y la demanda social en sus espacios de representación, que los fue teniendo escalonadamente a lo largo de los años, más las denuncias de corrupción que se cruzaron los candidatos que hasta el domingo pasado (en referencia a la primera vuelta) eran los favoritos, hicieron una conjunción de cosas que terminaron con este resultado de ponernos en el ballottage.

-¿Qué significó la elección del domingo pasado?

-No es fácil sentirse responsable de la esperanza de miles de fueguinos. Hace sentir que en realidad sos un instrumento de un cambio que otros desean y lo vieron reflejado en tus palabras, en las de tus compañeros. Para nosotros la elección del domingo fue increíble, nos ubicó la gente en la primera minoría en la Legislatura, creo que es la primera vez en la historia del ARI que saca este resultado en una elección. Y vemos las posibilidades de ganar como muy cercanas.

-Resultó llamativo el nivel de virulencia de la campaña, ¿sigue así?

-El oficialismo está llevando adelante una campaña de terror en estos tres días, diciéndole a la gente que la disputa en Tierra del Fuego es Kirchner contra Carrió, que no va a ser posible que el ARI gobierne más de seis meses porque el presidente no nos va a atender, etcétera. Pero creo que está teniendo el efecto contrario porque es tan impresionante lo que dicen que hasta el periodismo se está riendo. Han salido a decir cualquier barbaridad estos días, pero me parece que las cartas ya están echadas, nosotros hicimos todo lo que teníamos que hacer, la gente hizo un montón y creo que va a hacer más, y quizás el domingo se termine de concretar esta gesta del pueblo de Tierra del Fuego. Nosotros no somos los dueños de los votos, es la gente la que decidió que esto no va más. l

Fabiana Ríos se recibió de farmacéutica en Rosario y emigró al sur.