Araujo explicó los motivos de su partida

Carlos Araujo fue uno de los jugadores más regulares en el ciclo de Nery Pumpido. Con la llegada de Pablo Marini comenzó a perder eficacia y con el paso de las fechas quedó relegado hasta de la lista de concentrados. Su alejamiento de la entidad del parque es inminente. El Pipi ayer habló de todo y rescató los buenos recuerdos con que se va de Newell’s.

  —¿Cómo tomás la despedida?

  —Me voy mal. Me hubiera gustado terminar de otra forma. Acá hay mucha gente buena y me voy con ese recuerdo.

  —¿Te molestaba que en el último tiempo siempre eras relevado?

  —Sí. Son decisiones técnicas. Uno se fastidia porque quiere terminar jugando y sobre todo cuando lo ponen en una posición que no es la adecuada. Respeto totalmente la decisión del DT, pero me hubiera gustado actuar en mi puesto natural de lateral por derecha.

  —¿Crees que se te evaluó en una posición que no era la tuya?

  —Sí. Debía realizar un trabajo muy difícil (carrilero), que creo ningún compañero pudo cumplir. Después el técnico comenzó a jugar con línea de cuatro y el equipo mejoró un poco.

  —¿Cuál era la función específica que te pedía Marini?

  —La obligación era atacar y defender a la vez. Eso es muy sacrificado. Tuve partidos muy buenos y otros no. Necesitás a alguien que te releve a la hora de pasar al ataque y que te den una mano en defensa cuando avanza el lateral y el volante contrario. Estás todo el partido peleando con dos rivales. Y después cuando el equipo va perdiendo y te toca salir nunca te ponés contento. Rogás no ir perdiendo para seguir jugando. Es feo jugar pensando que no te conviertan para no salir.

  —¿Cómo te vas con la dirigencia del club?

  —Estamos un poco atrasados (salario) y eso obviamente causa fastidio a la hora de entrenar. Seguramente todos nos vamos a ir sin que nos deban ningún peso. No tengo miedo en decir que estamos atrasados en los sueldos. Por la situación que vive el país es normal que los clubes se atrasen en los pagos. l