Le ponen piedras

Central: se sumaron dos pedidos de embargo

La crítica realidad institucional que atraviesa Rosario Central se comprometió un poco más con la aparición de dos embargos, de un monto total que ronda el 1.400.000 dólares, que están siendo afrontados en Tribunales por la entidad de Arroyito. Con estos pedidos, Pablo Scarabino suma más piedras en el camino desde su reasunción ya que todavía no hubo posibilidad de encontrar formalmente el pagaré de 1.440.000 euros cobrado por la gestión anterior.

En ese convulsionado marco de acción, el primer embargo que ingresó al universo canalla fue de una suma cercana a los 600 mil dólares y proviene del club Combate de San Lorenzo (ahora estaría en manos de un representante). Esa institución reclama derechos económicos en el pase del delantero Marco Ruben a River.

Combate sería propietaria de un porcentaje de esa venta (20 por ciento) y de allí surgió la solicitud. Ante esta instancia, Central habría respondido con garantías propietarias vía judicial.

El caso más curioso
El caso más curioso es el pedido de embargo que trabó Juan Carlos Alvarez, un desconocido para las actuales autoridades canallas que habría cedido 605.974 dólares el 7 de febrero de este año y ahora habría trabado un embargo por 840 mil dólares. Lo llamativo es que la figura de Alvarez no coincidiría con la de un hombre sin tantos recursos económicos. No estaría bancarizado, viviría en un Fonavi de Ovidio Lagos al 2900 y además estaría inscripto en la Afip en la categoría I, es decir, que acusa un ingreso menor a 48 mil pesos por año. Los letrados de Scarabino le harán llegar hoy a la jueza que entiende en la causa auriazul, Liliana Giorgetti, esta información para investigar a Alvarez y a quienes podrían estar atrás de su aparición.

Estos embargos complican a Scarabino ya que le cierran fuentes de financiamiento y eso deriva en dificultades de pago para los sueldos de los jugadores y las leyes sociales pertinentes, además de los empleados del club y otras obligaciones contraídas.

Scarabino debe afrontar dos embargos por un total de 1.400.000 dólares.