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domingo,
20 de
mayo de
2007 |
Suerte de campeón
Los jugadores de Newell’s sintieron el golpe de la derrota, tal vez inesperada en el trámite, y por ello se retiraron del Coloso visiblemente fastidiosos y con la cara por el piso. La desazón invadió a los rojinegros porque entendieron que hicieron el máximo esfuerzo y ningún poroto se quedó en el Parque. Es más los tres se fueron para el Bajo Flores para engrosar la cuenta del líder del Clausura. A minutos de consumado el traspié y todavía con las pulsaciones altas, dos referentes del plantel como Justo Villar y Germán Ré, resumieron a la perfección lo que significó para el plantel leproso la victoria de San Lorenzo: “Tuvieron la suerte del campeón”, dijeron sin medias tintas, empleando una frase que en el correr de la semana puede traer respuesta de la gente del Ciclón.
Los muchachos de Pablo Marini sabían que estaban ante una gran oportunidad de ratificar las credenciales de buen equipo y darse el gusto de tumbar al líder. Por ello en la semana se habían juramentado hacer hasta el último esfuerzo para que el puntero trastabille en el Coloso ante la mirada atenta de todo el país futbolero pegado a la TV.
Pero a pesar del buen andar del equipo rojinegro en varios pasajes del partido la noche los encontró anémicos de puntos. Se esforzaron al máximo y sólo recibieron como premio el aplauso de la tribuna luego del pitazo final de Baldassi.
Por eso tal vez Gastón Aguirre y Oscar Cardozo prefirieron no hablar a la salida del vestuario (lo hicieron en la cancha) y emprendieron ráudamente la retirada, para evitar expresar sin anestesia algún concepto que evidencie la calentura.
Tal vez cuando bajen las pulsaciones habrá una mirada más reflexiva. Es cierto que Newell’s hizo un gran partido y si ganaba nadie podía objetarlo. Pero San Lorenzo también demostró que tiene un andar sólido y que entiende muy bien el mensaje de Ramón a la hora de trabajar los partidos.
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