La relación entre el oxígeno y la vista

La retinopatía del prematuro (Rop) es un problema ocular que se presenta con mayor frecuencia en bebés nacidos antes de la semana 30 de gestación y con peso menor a 1000 gramos. Su aparición está relacionada íntimamente con el suministro de oxígeno, un requerimiento frecuente en chicos que nacen antes de tiempo y con muy bajo peso.

Así lo explicó Guillermo Ingrassia, jefe del servicio de neonatología del Sanatorio de la Mujer de Rosario, quien manifestó que para que se presente retinopatía del prematuro deben darse algunos requisitos como la existencia de una retina inmadura y un factor de riesgo asociado. “Hasta el momento los estudios determinan que la alta concentración de oxígeno en la sangre del bebé provocarían en la retina una proliferación vascular patológica”, destacó el médico.

El bebé, en el útero materno, tiene en su sangre la mitad del oxígeno que tendrá al nacimiento, de modo que sus órganos (incluidos la retina) están acostumbrados a desarrollarse con poco oxígeno. “Cuando el niño nace antes, tanto el aire ambiente como el oxígeno que se les administra pueden llevarlo a una situación de exceso que desencadene efectos negativos como la estimulación de vasos que invaden anormalmente la retina. Esto es en verdad la Rop que no necesariamente es ceguera”.

En la actualidad existen monitoreos no invasivos que cuidan la oxigenación, sin embargo, señala Ingrassia “aún en las unidades de cuidado neonatal se piensa que si el niño oxigena mucho está bien”.

El especialista indicó que “el conocimiento de este problema por parte del equipo de salud es vital; hay que desterrar el concepto de que el niño cuando más rosadito mejor”.

Ingrassia dijo finalmente que “la verdadera prevención es el cuidado individualizado de cada recién nacido, la utilización de oxígeno como medicamento y las correctas vías de administración”.