Ruralistas quieren ver más acción

Los representantes de las entidades rurales se mostraron "satisfechos" con los acuerdos alcanzados con el gobierno nacional para solucionar los problemas del sector a la vez que calificaron como "positivo" el avance en ese sentido.

"Se podrá decir que hay soluciones reales cuando los beneficios lleguen al productor y la tonelada de trigo cueste 430 pesos, el kilo de novillo esté en tres pesos y las deudas del Banco Nación estén vigentes", ejemplificó.

En ese sentido, destacó que es importante que en la Secretaría de Agricultura se estén buscando formas para que el precio de la carne mejore y se pueda normalizar la situación respecto a los controles en el Mercado de Liniers.

Por su parte, Luciano Miguens, señaló que es prioridad desactivar la presión sobre el Mercado de Liniers y buscar un equilibrio para que el productor "reciba esa posibilidad histórica de mercados externos muy demandantes con precios favorables y que no se trasladen al mercado interno".

Por su parte, Mario Llambías, de Confederaciones Rurales, aceptó de buen grado que "se esté encontrando un camino en lo conceptual", pero alertó que "aún falta alcanzarlo en lo operativo" y abogó para que se pueda avanzar en ese sentido.

En esa línea, el dirigente cuestionó duramente la presencia de inspectores de la Secretaría de Comercio Interior en Liniers, que presionan a los consignatarios. Dentro de las entidades del sector cárnico que no participan de la mesa de diálogo con el gobierno, cunde cierto escepticismo sobre el resultado final de los acuerdos.

"Ninguna medida va a ser efectiva para aumentar la producción mientras no haya un precio transparente, y para eso hay que terminar con los precios máximos y la intervención en el Mercado de Liniers", señaló Angel Girardi, presidente de la Asociación de Productores de Carne Bovina Argentina (Aprocaboa).