Uso de la mesoterapia con fines médicos

La mesoterapia es una herramienta médica que consiste en aplicar medicamentos directamente en el área afectada a través de mínimas inyecciones. Si bien siempre se la vinculó con los tratamientos corporales y faciales, la técnica reviste beneficios para tratar dolores articulares, neurálgicos y hasta problemas respiratorios.

La doctora María Alicia Badillo practica la técnica en Rosario desde hace diez años y está interesada en difundirla como una alternativa médica. Antes de iniciar el diálogo con La Capital aclara que la mesoterapia “debe ser realizada por un médico y no por cualquiera que se capacite en un curso”.

Una sesión de mesoterapia tiene menos efectos secundarios que la ingesta de un antiinflamatorio y actúa mediante la aplicación de medicamentos en el lugar de la afección. “Se hace un parche de medicamentos debajo de la epidermis y esa medicación actúa y se metaboliza en grados altos, del 95 al 99 por ciento”, explica Badillo. “Todo esto sin que la medicación ingrese al torrente sanguíneo ni cause perjuicios en otros órganos que procesan medicamentos”.

Badillo reconoce que a la mesoterapia, se la sigue vinculando a tratamientos para eliminar grasas localizadas. “Funciona bien en celulitis, y flacidez, pero sirve también para hernias, lesiones del deporte y ciática”. Si el paciente tiene dolor, más allá de calmarlo, se trata la causa de esa afección.

En cuanto a los beneficios, si se trata de una enfermedad aguda, las mejorías aparecen con las primeras aplicaciones. Si en cambio es artrosis o artritis, se necesitan cuatro sesiones hasta que el período de aplicación se va espaciando. “Entre la tercera y cuarta sesión se aprecian mejor los resultados”, indica Badillo.

Pero no sólo el dolor preocupa a los pacientes, las alergias nasales o bronquiales y los dolores de cabeza persistentes son también motivo de consulta. “En el caso de alergias o sinusitis crónicas, se aplica una especie de vacuna, y en el caso de enfermedades neurológicas no centrales, también se ve la mejoría”.

“No hay nada que no sea de la medicina alopática”, aclara Badillo, y advierte, “en los casos de reumatismo o dolor articular jamás se pueden usar corticoides a través de la mesoterapia, si fuera indispensable, habría que aplicarlo por otra vía”.

Respecto a la celulitis, Badillo aclara que se trata de un problema circulatorio. “Como todo trastorno se puede mejorar considerablemente, pero luego se necesita un mantenimiento”.

Además de sus múltiples usos médicos, la técnica se aplica para tratar arrugas y líneas de expresión en el rostro y la adiposidad localizada, “siempre y cuando la obesidad sea de menor grado”, aclara la profesional.