Vecinos de un barrio de Baigorria denunciaron arreglos mal hechos en sus viviendas tras la pedrea

En algunas casas llueve en su interior. Momentos de tensión con funcionarios provinciales y entre los habitantes

Marcelo Abram / La Capital

Granadero Baigorria.- Vecinos del barrio Nuestra Señora de la Paz de esta ciudad denunciaron que los arreglos que les hicieron a las viviendas afectadas por la pedrea de hace unos días resultaron insuficientes, y luego de las últimas lluvias por lo menos en dos se produjeron filtraciones de agua. Hasta el momento se trabajó en el techo de unas cinco propiedades.

El barrio, conformado por un complejo de 212 viviendas, se encuentra ubicado en la zona oeste de Granadero Baigorria lindero a la autopista, y fue construido por la fundación Buena Nueva que encabeza el sacerdote Tomás Santidrián.

Luego de la intensa pedrea del día 15, la totalidad de los techos de las viviendas del barrio, que son de fibrocemento resultó dañada, por lo que hace pocos días comenzaron los trabajos de reparación, que habrían sido encargados por el gobierno provincial a cuatro empresas.

Durante la mañana de ayer funcionarios de la delegación Rosario de la Dirección de Viviendas de la provincia, junto con miembros de la Municipalidad se presentaran en el barrio a dialogar con los vecinos.

Al llegar al lugar además de los fuertes cuestionamientos que hicieron algunos vecinos, los funcionarios pudieron observar con asombro que dentro de los propios vecinos había fuertes diferencias.

Incluso algunos discusiones fueron subiendo de tono y pasaron a la acción cuando varios se tomaron a golpes de puño, situación que se mitigó debido a que rápidamente se presentó en el lugar una comisión policial, que permaneció en el barrio incluso varias horas después de que los funcionarios se retiraron.

Como el barrio fue construido en bloques de dos viviendas, y para cambiar los techos de fibrocemento por techos de chapa se necesita levantar por completo la construcción de todo el bloque, comenzaron a marcarse diferencias entre aquellos vecinos que aceptan que le saquen todos los techos, y los que no.

Esta situación derivó en fuertes discusiones, con incidentes menores que afortunadamente no arrojaron heridos. La presencia policial sólo se limitó a prevenir nuevas escaramuzas.

Cuando la calma retornó, los funcionario acordaron que una comisión integrada por funcionarios de la Dirección de Vivienda y la Junta de Defensa Civil recorrerán la totalidad de las viviendas para obtener la conformidad por escrito de los vecinos sobre los trabajos de reparación a realizar.