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 miércoles, 29 de noviembre de 2006  
Diputados mexicanos cumplen 24 horas de toma del estrado principal

Ciudad de México.- Diputados del partido gobernante y de la oposición de izquierda cumplieron hoy 24 horas de la toma del estrado de la presidencia de la Cámara baja, donde el viernes debe jurar como presidente Felipe Calderón.

Los legisladores permanecieron en el lugar toda la noche, en un duelo por el control de la tribuna, que por momentos se tornó violento.

Los coordinadores de las bancadas de los partidos Acción Nacional (PAN), Héctor Larios, y de la Revolución Democrática (PRD), Javier González Garza, anunciaron esta mañana que llegaron a un acuerdo de “no agresión” para evitar los enfrentamientos físicos.

En un ambiente tenso, sin una solución a la vista, el presidente de la Cámara baja, Jorge Zermeño, afirmó hoy que intentará llegar a un acuerdo, pero que, en caso contrario, pedirá la intervención de la fuerza pública para garantizar la ceremonia.

“Por la propia seguridad de los legisladores, por la propia integridad física de ellos mismos. Simplemente cuestión preventiva, no represiva de ninguna manera”, dijo.

Zermeño dijo que Calderón le habló por teléfono el martes para “informarse cómo estaba la situación” y señaló que se mantiene la decisión de realizar el traspaso de poderes en el Palacio Legislativo de San Lázaro, aunque no necesariamente en el salón principal.

“Está citado el Congreso el viernes a las nueve y media de la mañana (12.30 en Argentina) en la sede del Congreso, que es aquí el Palacio Legislativo de San Lázaro”, afirmó.

La Constitución mexicana ordena al presidente electo rendir juramento ante el Congreso, pero la sesión puede constituirse en una sede alterna, siempre que haya quórum. Sin embargo, hasta ahora Calderón ha descartado un cambio.

La trifulca en la Cámara de Diputados comenzó pasado el mediodía de ayer, tres días antes de la asunción.

Diputados del Partido Acción Nacional (PAN), al que pertenece Calderón, ocuparon la tribuna, ante rumores de que el Partido de la Revolución Democrática (PRD) la ocuparía para impedir la toma de posesión. En la disputa hubo golpes entre los legisladores.

La izquierda, segunda fuerza en la Cámara baja, pretende impedir la ceremonia en el Palacio Legislativo porque considera que Calderón derrotó mediante un fraude a su candidato, Andrés Manuel López Obrador, con participación del presidente saliente, Vicente Fox.

A las cuatro de la madrugada de hoy los diputados, luchando contra el sueño, se pusieron a interpretar canciones rancheras, como “Cielito lindo” y “El rey”. Algunos durmieron en bolsas de campaña y otros se quedaron sentados en las sillas del presidium.

Por la mañana se los vio tomando café y leyendo el diario en curules colocadas en el estrado, entre carteles que rivalizaban con lemas como “Estamos defendiendo la legalidad” o “Sufragio efectivo, no usurpación”.

“Si los diputados del PRD dejan la tribuna y prestan garantías suficientes de que no tomarán de nuevo la tribuna y dejarán transitar en paz y sin violencia el 1 de diciembre, en ese momento nosotros nos retiramos de la tribuna de manera inmediata”, dijo el diputado del PAN Cristian Castaño.

El Partido Revolucionario Institucional (PRI), tercera fuerza en el Congreso, se pronunció por un cambio de sede y sugirió que Fox no se presente en la ceremonia de traspaso de poderes.

El diputado del PRD Javier González Garza afirmó que su partido espera que se logre una salida, que implicaría una sede alternativa para que se desarrolle el juramento exigido por la Constitución.

En este caso el PRD no asistiría a la ceremonia alterna, lo cual permitiría de todas maneras que las demás fuerzas políticas, que ya garantizaron su presencia, logren quorum.

“Si nosotros decimos «no va a tomar protesta (rendir juramento) en ninguna parte», pues estamos locos. Y si ellos dicen «tenemos que tomar protesta ahí», están locos”, señaló.

“En mi opinión hay dos cosas fundamentales: por un lado nosotros, que tenemos cuentas pendientes, agravios con todo lo que ha pasado con el presidente Fox, no estamos dispuestos a una ceremonia tradicional rindiéndole honores al señor Fox. Y por otro lado la necesidad de que se pueda llevar a cabo la toma de protesta”, dijo. (DPA)


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