Los barrabravas no hacen nada gratis

Luis Alberto Yorlano

Los aprietes de las barras para digitar los resultados de los partidos no es nuevo. Desde hace tiempo se viene hablando del tema. Pasaron once años y aquellos que estuvimos en el Gigante no olvidaremos jamás la vuelta olímpica de San Lorenzo, acompañados por los canallas, que en ese momento eran hinchadas amigas y tampoco faltaban los abrazos entre dirigentes. Durante esa semana no se había hablado más que del arreglo entre sus hinchadas y que a través de la extorsión los de Central habrían obligado a sus jugadores a dejar ganar a los del Bambino Veira. El rumor era que se habría manejado una buena cantidad de dólares y uno de los que habría colaborado era Marcelo Tinelli, confeso hincha de San Lorenzo. En ese año, vaya casualidad, también estaba en la puja por el torneo Gimnasia de La Plata. Y el más reciente, y que trajo algunos problemas a quienes hacíamos el programa Polémica en los Estadios por canal 7, era lo que estaba ocurriendo en Lanús. Sus jugadores habrían sido apretados por sus hinchas porque debían perder varios partidos y dejar afuera a su técnico, que había denunciado a los barrabravas del club. Ese técnico hoy está dirigiendo a Central y es Néstor Gorosito. Siempre lo negaron, pero los resultados estaban a la vista.

El 7 de noviembre de 2004 Ovacion tituló "De aficionado a barrabrava" y en uno de sus párrafos hacía mención al buen pasar de estos nenes y lo más grave, desde algunos lugares que se están investigando, que estos nuevos socios estarían operando como agentes en los arreglos de partidos y realizarían a través de extorsiones a los jugadores de su equipo.

El 28 de noviembre del mismo año el matutino tituló ¡Qué incentivación! Usted también leía ese domingo que "nadie puede ignorar las especulaciones. Que Gimnasia le dará una mano a Newell's para perjudicar a Estudiantes", recordemos que Newell's tenía 32 puntos y Estudiantes 30, y Central no dudaría en darle una mano a River mientras que Emmanuel Villa le decía a La Capital que "no veía mal ir para atrás frente a Estudiantes en la última fecha, con tal que Newell's no salga campeón". ¿Qué se hizo con esto, que además estaba grabado? Nada, como siempre. Incluso cuando el jugador fue citado al tribunal dijo que el periodista había sacado de contexto sus declaraciones.

El 19 de diciembre de 2004, bajo el título "Luchemos por un fútbol mejor", en Ovacion, el presidente de la AFA, Julio Grondona, en el club Real de Arroyo Seco dijo con respecto a las barras que apretaban a los jugadores que "estos tipos hasta hacen expulsar jueces y los sacan de la cárcel, porque dicen que se resfrían", y amplió: "Los dirigentes no estamos para sacar a los violentos, eso lo deben hacer los que cobran para cumplir con esa tarea". En esa misma semana Gallego, que dirigía a Newell's, se le escuchó decir que "cuando me haga cargo de Independiente los voy a rajar a todos". ¿Qué quiso decir con eso? Que Independiente no tendría que haberle ganado a Newell's. Esto no es nuevo. Nadie lo podrá parar. Las barras viven de los arreglos. l