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domingo,
12 de
noviembre de
2006 |
Otro mapa. Persiste el contagio en la población heterosexual, y se estabilizó entre
El sida no detiene su
marcha y avanzó entre
la comunidad travesti
Cuando acabe el año habrá 200 nuevos rosarinos
con VIH. En la provincia hay unos 7.000 infectados
Para cuando Rosario conmemore el próximo 1º de diciembre el Día Internacional de Lucha contra el Sida ya habrá conocido el nuevo mapa trazado por la enfermedad en la ciudad, donde se destacan dos grandes ejes: continúa la preocupación por la persistencia de la epidemia entre las relaciones heterosexuales y es la población de travestis la víctima más visible de la afección en los últimos años. Hoy hay 869 pacientes en tratamiento retroviral dentro de la red de salud municipal y cuando culmine el año habrá 200 nuevos rosarinos diagnosticados con VIH. Aunque la mayor transmisión del virus se sigue produciendo actualmente por vía heterosexual, entre los grupos vulnerables, la población travesti recibió el impacto mayor, a diferencia de las trabajadoras sexuales y los usuarios de drogas inyectables que lograron estabilizar sus porcentajes de infección.
El VIH se halla hoy en cifras de estabilidad en la prevalencia poblacional. Por ejemplo, en la transmisión vertical, es decir de madres a hijos, la cifra no supera el 0,8 por ciento de las mujeres que dieron a luz tanto en hospitales públicos como en sanatorios privados.
Uno de los objetivos para el año próximo será impulsar una fuerte campaña para que la transmisión vertical sea un "problema de la pareja". Por ende, la prevención y la utilización de preservativo será un compromiso de hombres y mujeres embarazadas. Los chequeos se harán en el primer trimestre del embarazo, porque está probado que la transmisión del virus se ha producido durante la gestación del bebé.
"Esto revela que la epidemia no está expandiéndose de manera descontrolada en la población heterosexual, sino que persiste y se encuentra en fase de control", definió el titular del Programa Municipal de Sida (Promusida), Damián Lavarello, quien además recordó que el área lleva ya una década comprando y distribuyendo preservativos a través de toda la red de salud pública, el Centro de la Juventud y diferentes organizaciones no gubernamentales.
Y más aún, el funcionario detalló que en lo que va de este año ya se llevan repartidos unos 400 mil preservativos. "La gente los reclama en forma sostenida", explicó.
Grupos vulnerables
Aunque más allá de los esfuerzos, la situación de la epidemia queda reflejada al desglosar la incidencia del virus en las denominadas "poblaciones vulnerables". En las relaciones de hombres con hombres existe un 10 por ciento de personas conviviendo con el virus, "un porcentaje preocupante", definió Lavarello.
Sin embargo, en los usuarios de drogas vía endovenosa o inyectable se ha detectado a lo largo del año que el porcentaje de afectados tiene un escaso margen de crecimiento. En rigor, a través del reparto de kits de jeringas para uso individual -trabajo encarado por diversas ONGs, la Municipalidad y la Universidad Nacional de Rosario (UNR)- se ha logrado lentamente que los adictos que usan agujas no las compartan.
Lo que preocupa a las autoridades es la expansión de nuevos casos entre los travestis. Un crecimiento que el titular del programa municipal calificó de "alarmante" y que no sólo se produce aquí, sino en todo el país y en Latinoamérica.
Es más, el profesional aseguró que "se están llevando adelante investigaciones para poder comprender la especial vulnerabilidad de esta población ante la enfermedad". Y aclaró que si bien es un grupo que recibe servicios preventivos -como el reparto de preservativos-, no ha recibido un hasta ahora un abordaje específico.
De esta manera, según detalló Lavarello, se intentará saber "por qué aunque tienen la información sobre la enfermedad, no consiguen practicar una prevención que sea sistemática y por qué se cuidan, pero a veces se exponen a situaciones de alto riesgo de contagio".
Al esbozar una hipótesis sobre las causas de la afección entre esta población, el funcionario señaló como uno de los factores a tener en cuenta son "las grandes diferencias sociales que hay entre el cliente y la chica travesti, por lo que puede existir una mayor demanda de sexo sin el uso de preservativo por grandes sumas de dinero".
Lo cierto es que en términos generales y más allá de la comunidad travesti en particular, para cuando finalice el 2006, habrá 200 nuevos diagnósticos de VIH positivo, y 70 infectados que morirán como consecuencia de este mal. El sida en Rosario seguirá siendo una de las principales causas de muerte en personas entre 25 y 35 años. Al igual que otros años, se estima que en toda la provincia conviven con el sida unos 7.000 santafesinos y que sólo la mitad sabe que está contagiado.
Bajo la órbita del Promusida existen en la actualidad 869 pacientes en tratamiento, de los cuales unos 100 se atienden en los centros de salud y el resto en los hospitales. Este indicador trasluce que cuando acabe el 2006, habrá 200 nuevos seropositivos, de los cuales 60 comenzarán a ingerir el cóctel de drogas retrovirales. Ocho años atrás, los contagiados eran sólo 400.
Quizás otro dato llamativo, de este informe anual preliminar es que la comunidad aborígen que reside en la ciudad no está al margen del contagio. Entre los 30 mil tobas relevados por el Promusida, hay una docena de infectados. Un índice muy bajo, pero que refuerza la idea que el sida no distingue género, edad ni raza. Incluso hay un equipo de antropología y salud que está difundiendo a través de talleres, videos y folletería las formas de prevención incluso en la lengua toba qom.
Producción periodística: Lucas Ameriso, Eugenia Langone y Orlando Verna.
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Para Valeria, que es travesti y seropositivo, el cóctel de drogas, alcohol y plata es mortal.
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