Consumo

GNC: cómo impactó la nueva reglamentación

La exigencia a los talleres de certificar nuevas normas de calidad redujo la cantidad de instaladores e infló los costos

Marcos Cicchirillo / La Capital

La renovación de la oblea anual del GNC multiplicó su costo prácticamente por tres desde la salida de la convertibilidad. La explicación de los talleristas rosarinos consultados por AUTOS es que desde comienzos de año se vieron obligados a certificar normas de calidad de trabajo y eso representó un incremento significativo de los costos, que debieron trasladar a los usuarios.

  Lo cierto es que también la certificación NAC-E 408, que finalmente implementó el organismo de control, Enargás, significó que una importante cantidad de talleres dejaran de realizar este tipo de trabajo y se concentrara en un pequeño grupo que, ante el fuerte incremento de la demanda, se vio “habilitado” para subir sus precios al reducirse ostensiblemente la competencia.

  Es que el precio del trabajo no está regulado. En la actualidad, en Santa Fe se encuentran habilitados por el Enargás 83 talleres, casi el 10% de los 810 existentes en todo el país. En la provincia hay casi 130 mil vehículos con equipos registrados, algo menos del 10% del parque que existe en la Argentina (1,42 millón) y 104 estaciones de carga sobre un total de 1.457.

  Hasta el año pasado, el Enargás sólo exigía normas de calidad a los distribuidores completos de GNC, que en la provincia de Santa Fe son seis, y tres los centros de control de cilindros (43 en todo el país), según publica en su página de Internet el Enargás a mayo de 2006.

  Pero, como admitieron varias fuentes del sector consultadas que pidieron reserva de su identidad, las condiciones en las tareas de control que realizaban los talleres eran bastante deficientes. Por eso, el Enargás decidió “bajar” al nivel de talleres las exigencias de normas de calidad.

  Aun así desde 1988, año en que entra en vigencia este tipo de combustible, en Argentina se registraron 41 incidentes, que se debieron casi en partes iguales a equipos fuera del sistema, a fallas en los equipos o en los equipamientos y a colisión de vehículos.

  Desde el Enargás señalaron que la situación con la habilitación de talleres se fue normalizando y que en la actualidad aproximadamente se están sumando en la ciudad tres talleres por mes para poder trabajar en la revisión de los equipos de GNC. Desde las tres certificadoras de normas habilitadas coinciden con la opinión del ente de control.

  Por otra parte, desde el organismo descartaron que se adopte por el momento la utilización de una tarjeta magnética, un proyecto que —reconocen— se viene estudiando desde hace tiempo.

El negocio en el mundo
Argentina ocupa el primer puesto en el ránking de países con vehículos con GNC, de los 5,1 millones aquí hay 1,42 millón de rodados. Detrás le siguen Brasil (1,1 millón), Paquistán (1 millón), Italia (380 mil), India (248 mil) y Estados Unidos con 130 mil unidades. Así América representa el 56,14% del total, Asia el 31,17%, Europa el 11,41%, Africa el 1,24% y Oceanía con el 0,05%.

  En la Argentina 18 provincias están abastecidas con GNC y tiene una participación del 15,33% en el mercado de combustibles en el país, detrás del gasoil (64,29%), nafta súper (17,93%), y por delante de la nafta común (2,45%).

  De las provincias, Santa Fe está cuarta en el consumo de GNC con el 8%, detrás de Buenos Aires (47%), Capital Federal (12%) y Córdoba (10%) y apenas supera a Mendoza por un punto porcentual.

  Según el Enargás, de los 129.097 vehículos registrados en la provincia a febrero de este año, 119.742 mil son de uso particular, 8.313 son pick-up, y llamativamente apenas 677 figuran como taxis, una cifra que claramente no se condice con la realidad más allá de cómo aparezcan en los papeles. Finalmente, 39 son de uso oficial y 325 para otros usos.