Entrevista. El ex piquetero y hoy funcionario derrama elogios a los socialistas

D'Elía asegura que "Binner y Lifschitz son compañeros del campo del pueblo"

También reclama otros cuatro años del presidente en la Rosada. "Prefiero al pingüino", sentenció

Javier Felcaro / La Capital

Recuperando la impronta transversal que se creía perdida, Luis D'Elía, ex piquetero y actual funcionario nacional, reivindicó las figuras de los socialistas Hermes Binner y Miguel Lifschitz, a los que definió como "compañeros del campo del pueblo". Además, en su rol de artillero verbal de la Casa Rosada, aseguró que "realmente necesitamos otros cuatro años de Néstor Kirchner en la Presidencia, y muchos más de kirchnerismo".

El miércoles pasado, durante la fugaz visita del jefe del Estado a Rosario, a nadie escapó la presencia de varios carteles con la leyenda "Kirchner presidente, Binner gobernador", firmados por la Federación de Tierra y Vivienda (FTV), que lidera D'Elía.

"Somos respetuosos de lo que expresan nuestros compañeros en cada provincia", explicó a La Capital el hoy subsecretario de Tierra y Hábitat, que destacó que las huestes rosarinas de la FTV, "que tienen una vieja relación con el socialismo y, además, militan en el kirchnerismo de la primera hora, sienten que esa es su síntesis política".

Acerca del ex intendente, uno de los objetos del deseo del oficialismo, D'Elía aclaró que "a Kirchner lo reconocemos como conducción política y, por lo tanto, acatamos sus decisiones, pero también respetamos lo que cada regional construye, más allá de que a veces esas dos realidades compatibilicen o no".


Reconocimiento
"Reconozco en Binner a un buen compañero del campo del pueblo, independientemente de las divisiones electorales. Seguro que, como nosotros, quiere una Argentina democrática y participativa", prosiguió.

Ni siquiera las posiciones del diputado nacional frente a los proyectos del kirchnerismo y el perfil opositor del Partido Socialista (PS), ratificado hasta el hartazgo, parecen mellar la buena sintonía.

"Binner, en cada una de sus declaraciones, siempre fue cuidadoso y respetuoso. Es público y notorio que entre él y Kirchner ha existido la mejor de las relaciones", agregó, consciente del peso de sus palabras.

Aunque el ex piquetero tampoco ahorró elogios para el intendente, reciente destinatario de pintadas anónimas que, tras la invitación al presidente a desembarcar en Rosario para inaugurar viviendas, lo compararon con Eduardo Lorenzo Borocotó, artífice de un memorable salto del macrismo al oficialismo en tiempo récord.

Después de advertir sobre su desconocimiento del "microclima político de Rosario", D'Elía enfatizó: "Tengo un gran respeto por Lifschitz, un compañero inobjetable del campo del pueblo. No es merecedor de este tipo de provocaciones".

Respecto del presente del justicialismo santafesino y sus dos virtuales precandidatos a gobernador, los diputados nacionales Rafael Bielsa y Agustín Rossi (jefe de la bancada oficial), destacó como positiva la existencia de "todo un proceso de recambio, incluso hasta generacional".

"Somos respetuosos de las decisiones que toma el presidente, sobre todo cuando se está jugando la consolidación de un proyecto alternativo a lo que fue la noche neoliberal conservadora de la década del 90", argumentó el funcionario, que puntualizó: "Habrá candidatos que me gusten más o menos, pero lo que se busca es fortalecer la posición de Kirchner".

A quien fustigó sin miramientos fue al ex gobernador y actual senador nacional Carlos Reutemann, alguien que, según el ex piquetero, "expresó lo peor del menemismo y articuló con un proyecto que destruyó la Nación".

"Los menemistas dejaron los peores indicadores de desarrollo humano de nuestra historia", prosiguió D'Elía, razón por la cual sentenció: "No tengo ninguna expectativa política respecto de él (por el Lole)".

De cara al 2007, y sin cansarse de repartir acusaciones al ex ministro de Economía Roberto Lavagna, el funcionario se metió de lleno en la búsqueda de la fórmula oficial, que sigue -y nada indica lo contrario- pendulando de Kirchner a la primera dama, Cristina Fernández.

"Tengo un gran respeto por la pingüina, una mujer talentosa y capaz, llena de cualidades. Es una de las presidenciables de nuestro sector político. Pero, para el próximo período, prefiero al pingüino", subrayó D'Elía, apelando al guiño zoológico con que en Balcarce 50 definieron a la figura que encabezará el binomio.

Luego renovó su chapa de hiperkirchnerista y justificó la necesidad de la reelección del santacruceño en la consolidación de "un proceso de cambios que puso a la Argentina en un lugar absolutamente distinto al que teníamos hace tres años, cuando éramos un país con la pata quebrada".

Frontal como siempre, el también amigo del presidente venezolano, Hugo Chávez, hizo hincapié en que "Kirchner nos devolvió la autoestima y la posibilidad de ser una Nación viable y seria en el marco de un contexto latinoamericano como nunca tuvimos en 200 años".

"Realmente necesitamos otros cuatro años de Kirchner, y muchos más de kirchnerismo", concluyó.

"Es público y notorio que entre Binner y Kirchner ha existido la mejor de las relaciones".