Desacuerdo. Vecinos se reunieron con funcionarios para escuchar el proyecto

Chispazos por el nuevo hospital Provincial

Juntaron 1.500 firmas en contra del traslado del Batallón 121. Piden que se termine el Roque Saenz Peña

Una asamblea entre vecinos y funcionarios provinciales para consensuar posiciones sobre el futuro del Batallón 121 terminó ayer en forma abrupta entre gritos, explicaciones vehementes y ponencias cruzadas. De la reunión participó la vicegobernadora, María Eugenia Bielsa, y la ministra de Salud, Silvia Simoncini, quienes apenas pudieron exponer el proyecto de construir en ese sitio un centro de salud de alta complejidad. "A la democracia le falta mucho", argumentó Bielsa ante el fracaso del encuentro, y terminó escuchando, en forma individual, argumentos a favor y en contra de la iniciativa provincial. Entre ellas la que avalada por 1.500 firmas pide que no se traslade el batallón y se termine el hospital Roque Saénz Peña.

"Cuando se toma la decisión de no escucharse pasan estas cosas", evaluó la vicegobernadora y dijo que la idea de construir un hospital de alta complejidad para reemplazar la obsoleta estructura del Provincial seguirá tomando forma. "Tenemos la convicción de que este proyecto renovará a la zona sur", comentó y agregó que toda iniciativa genera incertidumbre las que podrán disiparse en una futura charla. Además señaló que el camino que se inicia requiere consensuar distintos aspectos de la obra con los vecinos y el municipio.

"Acá veo caras que no conozco", dijo al comenzar la reunión un integrante de la comisión que quiere declarar al batallón como patrimonio histórico. La frase dividió aguas y no pasó por alto para los vecinalistas de la zona sur que acudieron para defender el hospital. A partir de ese momento, la asamblea perdió el rumbo y los oradores fueron interrumpidos con frecuencia hasta que después de la intervención del concejal Juan Rivero (PS), la reunión se fracturó sin remedio.

"No queremos ninguna intervención en el Batallón 121, ninguna obra nueva porque esto es un patrimonio histórico y tiene que ser ámbito cultural y educativo, esto es la historia viva de la ciudad de Rosario", explicó Angel Dotto. Y dijo que tienen 1.500 firmas que avalan esa postura. "¿Por qué no terminan el hospital Saenz Peña?", acotó Mari Bocini. Por su parte, Fabio dijo no oponerse al hospital si se hiciese de manera inteligente, "sin abrir calles que conecten este barrio con otros de alto índice delictivo", explicó.

"No estamos en contra del hospital. El miedo es que traigan la marginalidad al único barrio residencial que hay en la zona sur. ¿Por qué no lo hacen donde están los problemas? Se propusieron otros terrenos pero tienen soberbia y no quieren debatir", argumentó Maximiliano. E insistió en que la apertura de calles entre dos sectores urbanos diferentes desnivelaría la actual calidad de vida del barrio.

A favor del proyecto, Juan dijo no entender cómo se rechaza una de las obras más importantes de la zona sur que siempre quedó atrás en iniciativas. "Si bien son los vecinos más cercanos, no pueden tomar ese predio como propio", sostuvo. Y acotó que en prioridades, la salud pública está por encima de otros intereses. "Esta obra cambiaría la vida de miles de personas", aseguró.

Para el médico Sergio López Pérsico, es la primera vez que un barrio se niega a tener un centro de alta complejidad, iniciativa que "jamás desvaloriza las viviendas".

Bielsa escuchó versiones a favor y en contra del proyecto del hospital en la zona sur.