Caso Drovandi: los cuatro chicos detenidos negaron su participación en el homicidio

Declararon ayer en Tribunales. El quinto sospechoso, que es mayor, no reconoció su supuesta confesión policial

Los cuatro menores detenidos por el crimen de Luciano Drovandi negaron haber tenido alguna participación en el homicidio del muchacho de 25 años, al que le dispararon un balazo en el pecho para robarle la moto hace siete días. En tanto, un joven de 18 años también implicado en el ataque se abstuvo de prestar declaración y, a pesar de que no reconoció la confesión policial en la que supuestamente había admitido haber participado del ataque al motociclista, quedó imputado como coautor de robo seguido de muerte. Bajo la misma acusación fue interrogado el adolescente de 16 años que guardaba en su casa la moto robada a la víctima, aunque este dijo haberla hallado en un baldío.

Una semana después del fatal ataque al joven motociclista en Pellegrini y Provincias Unidas, ninguno de los detenidos por el caso admite judicialmente haber tenido relación con el homicidio. Las pruebas de peso que vinculan a los sospechosos al caso son declaraciones policiales que ninguno revalidó en Tribunales. Así, cinco jóvenes permanecen detenidos por el homicidio a pesar de que, según el único testigo, el crimen fue cometido por dos personas.

Las detenciones más recientes se produjeron el jueves, cuando la policía apresó a Leonel S., de 18 años, y a Néstor, de 16, a quien le dicen Chanchín. De acuerdo con fuentes de la causa, la policía llegó a la casa del primero tras recibir un llamado telefónico anónimo que lo señalaba como el autor del homicidio. Los efectivos fueron hasta la vivienda del muchacho, en Liniers al 4200, y si bien el joven admitió haber participado del asalto a Luciano, incriminó a un menor como el autor del disparo mortal.

El muchacho dijo en su confesión policial que Chanchín lo había "apretado" para ir a cometer un robo y que interceptaron la Honda 50 de Drovandi en mitad de la calle. Agregó que el conductor resistió el asalto y que el chico que lo acompañaba le disparó. Luego condujo a los agentes hasta la casa de Chanchín, en Rouillón al 3800. Allí arrestaron al menor y hallaron la moto.

Esos dichos no fueron consentidos por el muchacho al declarar ayer ante el juez de Instrucción Nº 13, Osvaldo Barbero. Leonel se abstuvo de declarar pero no ratificó su declaración policial cuando se la leyeron. Quedó preso como presunto coautor de un robo seguido de muerte.

Mientras tanto, Chanchín declaró en el juzgado de Menores Nº 2. Allí contó que el viernes, luego de comer un asado, fue con unos amigos a un descampado a cortar césped para los caballos que usan para cirujear. Entonces vieron entre unos cañaverales a Lenoel S., al que conocen del barrio, quien llegaba en moto con una mujer y un bebé. Según su declaración, el muchacho juntó unas hojas alrededor de la moto y les prendió fuego. El menor añadió que esperó a que Leonel se fuera y que, con sus amigos, apagaron el fuego para llevarse la moto, la cual guardó en su casa.

Aunque sólo lo incrimina el hallazgo del rodado, el joven quedó imputado por el crimen tras una declaración en la que evidenció serias dificultades para expresarse e, incluso, reconocer los días de la semana. El chico, al que en su casa le dicen Sapito, es el tercero de ocho hermanos. "El sólo encontró la moto y la llevó a mi casa. Que no le echen la culpa de lo que no es", dijo en Tribunales su mamá, Laura Noemí Salto, de 34 años, que va a la escuela primaria de noche, junto con su hijo.

"Yo me pongo en el lugar de ese chico que mataron, de esa madre que está sufriendo y la entiendo. Si mi hijo fuera culpable realmente no lo estaría apoyando", dijo Laura, rodeada por amigas del adolescente que suelen ir con él a bailar a Mogambo o a tomar algo al centro.

Por la muerte de Drovandi también fueron interrogados ayer otros tres chicos que habían sido apresados el lunes, de un modo ocasional, tras el arrebato de la cartera a una mujer. En la comisaría 6ª, según la policía, uno de ellos admitió haber presenciado el ataque a Drovandi y se autoincriminó en el robo de dos motos. Sin embargo, los tres negaron alguna vinculación con el homicidio al declarar ayer en el juzgado. "Me hice cargo para que me dejaran de pegar", sostuvo uno de ellos.

Maximiliano M., de 17 años; Adolfo G., de 15 años; y Lucas M., de 15, también fueron sometidos a reconocimientos por el robo de la cartera y la sustracción a mano armada de una moto Yamaha; dos hechos ocurridos el fin de semana pasado. No obstante, los señalamientos no fueron certeros.

"Chanchín" fue apresado el jueves.