Prevención. La provincia investiga el caso y estudia medidas para garantizar la estabilidad de los coches

Momentos de pánico se vivieron en un micro al tambalearse la carrocería

La estructura se movía para todos lados y los pasajeros obligaron a los choferes a cambiar la unidad

Atilio Pravisani / La Capital

Santa Fe.— Un colectivo de la empresa El Norte que había partido desde Reconquista hacia esta capital generó momentos de zozobra entre los pasajeros cuando a poco iniciar el viaje su estructura comenzó a moverse en forma extraña de un lado a otro. El episodio originó escenas de pánico y la gente obligó al conductor a detener la marcha y a cambiar de vehículo.

  El hecho ocurrió en la madrugada de ayer y reflotó el temor de los accidentes carreteros pocos días después del grave hecho que se registró en la ruta nacional 11, que dejó un saldo de diez muertos y centenares de heridos, aunque a esa tragedia se le atribuyó como causa desencadenante el denso manto de niebla reinante.

  Marcelo Sheil, director de la Subsecretaría de Transporte, confirmó a La Capital el suceso, y si bien dijo que aún no podía sacar conclusiones definitivas sobre lo acontecido precisó que se estaba investigando el hecho, razón por la cual como primera medida se determinó que la unidad fuera llevada a un taller de revisión técnica para un análisis exhaustivo.

  De acuerdo a lo narrado por los pasajeros cuando llegaron a la terminal de Santa Fe, tres horas después del horario previsto, el coche partió de Reconquista con su capacidad completa y a los pocos minutos de haber hecho una escala en Villa Ana comenzó a bambolearse para todos lados, desencadenando un pánico generalizado entre el pasaje y el inmediato pedido a los choferes para que detuvieran la marcha y cambiaran la unidad.

  Si bien en un primer momento los responsables del rodado se negaron a efectuar el cambio requerido, finalmente ante la insistencia de la gente de no continuar el viaje y la decisión de efectuar la denuncia ante la policía accedieron a realizar el trasbordo.

  Sin embargo, la odisea de los atribulados viajeros no concluiría con esa medida, porque a pesar de haberse realizado el cambio a los pocos minutos el nuevo vehículo también debió ser detenido por registrar inconvenientes.

  En este caso no fue precisamente el bamboleo de la carrocería el motivo por el cual los conductores optaron por parar sobre la banquina sino la rotura de una correa, inconveniente que provocó un retraso aún mayor porque debieron aguardar la llegada de un mecánico para la reparación.

  Con esta seguidilla de problemas el colectivo que tenía que llegar a Santa Fe a las 3, lo hizo a las 6, y en un marco de gran nerviosismo de los pasajeros que protestaban en forma airada por la situación que debieron atravesar.

  El funcionario de Transporte señaló que las oficinas de su área no tuvieron conocimiento de denuncias formales en la policía ni tampoco en los locales de la empresa que les sirvieran como elemento para avanzar en una investigación sobre lo sucedido.

  No obstante, reconoció que los pasajeros pudieron haber efectuado un reclamo ante un destacamento de Gendarmería, como ellos lo declararon a la prensa. En ese sentido afirmaron que cuando intentaron hacer la denuncia cuando todavía estaban en Reconquista le exigieron que fuera a testificar el pasaje completo, razón por la cual decidieron dejar una constancia ante los gendarmes.

  Sheil se preocupó en resaltar que el coche con problemas en su estructura llegó ayer a última hora a Santa Fe y que de inmediato fue llevado a un taller de revisión técnica distinto al que lo hizo por última vez, para evitar cualquier tipo de suspicacia y esclarecer las causas que produjeron el episodio.

  Por su parte, el subsecretario de Transporte, Miguel Latorre, reafirmó que desde esa área se pedirán mejoras en los colectivos de doble piso, no solamente en lo que se refiere a la posibilidad de hacerle bajar el centro de gravedad de la carrocería sino también a la seguridad que deben brindar las butacas aplicando la reglamentación para el uso de cinturones. Según se pudo saber, se tiene en estudio que los colectivos de doble piso primero deberán completar el pasaje en el piso inferior y luego luego de que esté completo recién se permita el acceso al de arriba, aun cuando los viajeros quieran ir al nivel superior.

  “Para el caso de los llamados colectivos de piso y medio, se cargarán las bodegas con un lastre para sustituir la falta de valijas, porque cuando tienen todo el pasaje arriba sin el contrapeso de las valijas son de menos estabilidad que los de doble piso”, explicó el funcionario.

  También explicó que a eso se sumará el anclaje de los asientos, para lo cual se está revisando el diseño que deberían tener en función de la utilización del cinturón de seguridad a colocarse en los colectivos, porque éste puede convertirse más peligroso cuando está inclinado y funcione bien cuando el asiento se encuentre derecho.

La tragedia en la ruta nacional 11 sensibilizó el espíritu de los usuarios.