Escandaloso fallo por la muerte de una mujer en una comisaría

Había cinco policías imputados. Cuatro fueron absueltos y sólo una mujer fue condenada a prisión perpetua

imputados fueron absueltos, lo cual provocó insultos a los jueces de parte de los familiares de la víctima y militantes de derechos humanos, y algunos incidentes en la puerta de los tribunales.

Sin embargo, la ex cabo primero Marta Jorgelina Oviedo -ausente al momento de leerse el fallo- no irá a una cárcel, ya que el Tribunal Oral Criminal Nº3 de Quilmes resolvió que, por cuestiones de salud, continúe con el régimen de prisión domiciliaria como llegó al juicio.

Andrea Viera y su novio Gustavo Cardozo fueron torturados en mayo de 2002 en la comisaría 1ª de Florencio Varela con el objeto de que confesaran su participación en un tiroteo en el que había sido herido un policía. Los jueces Alicia Anache, Armando Topalian y Alejandro Portunato, consideraron a Oviedo coautora de tortura seguida de muerte en el caso de Viera, pero la absolvieron del cargo de torturas a Cardozo. En tanto, fueron absueltos de ambos cargos por el beneficio de la duda los otros cuatro policías: David Gutiérrez, Carlos Maidana, Oscar Luciano Farías y Diego Herrera.

Al fundamentar el fallo unánime, Anache criticó con dureza la investigación del fiscal de Quilmes a la que calificó de "superficial". Si bien el tribunal dio por probados los dichos de Cardozo, consideró que su único testimonio no alcanzaba para condenar a los otros cuatro imputados. La diferencia con Oviedo radicó en que hubo testigos que la escucharon decir que había participado de la golpiza a Viera en la oficina de expedientes, donde ella trabajaba. "Yo no le pegué mucho, seis o siete patadas, los que se zarparon fueron los otros", escuchó un testigo decir a la mujer policía, lo que se suma al testimonio de Cardozo, que vio cómo Oviedo le decía "rata" a Viera y le pegaba arriba de un escritorio.

Asimismo, los jueces ordenaron investigar por falso testimonio a varios policías que durante el juicio habrían encubierto a sus compañeros. También consideraron "inexplicable" cómo algunos policías que desfilaron como testigos, no llegaron al juicio como imputados y ordenaron que se investigue las palizas que varios detenidos de la seccional dijeron haber recibido por declarar en esta causa contra los policías.

Por su parte, el fiscal José María Gutiérrez dijo estar "satisfecho porque en una causa en la cual hubo un pacto de silencio absoluto entre el personal policial, al menos se probaron las torturas en la comisaría y se condenó a una persona".


Incidentes
Pero la satisfacción no fue compartida por la familia de Viera. "Todos quedaron libres. ¿Dónde está la justicia?", dijo entre lágrimas Eugenia, hermana de la chica asesinada. "Ya sabíamos que no estaban imputados todos los que fueron, pero este fallo es escandaloso, vamos a apelar", dijo el abogado de la familia, Luis Valenga.

El fallo provocó incidentes dentro y fuera de la sala. En el recinto, familiares de Viera y militantes de agrupaciones de derechos humanos insultaron a los jueces pero no pudieron acercarse porque había un cordón de 11 que separaba el sector del público con el lugar donde estaban los jueces y tres de los imputados. (Télam)