El doble desafío de Brasil

El pentacampeón quiere clasificar y demostrar por qué es favorito

Brasil saldrá a jugar hoy ante Australia con un doble desafío. Por un lado, alcanzar una victoria que le asegure la clasificación anticipada a los octavos de final. Y por el otro, exhibir las cualidades que lo señalan como el gran favorito al título y que no mostró en el debut, cuando le ganó por la mínima diferencia a Croacia.

  El duelo entre los vencedores de la fecha de apertura del Grupo F comenzará a las 13 en Munich.

  Australia promete ser un duro escollo para los brasileños, por la moral alta del equipo luego de la espectacular victoria sobre Japón por 3 a 1 y por la fuerza física de sus jugadores.

  Ronaldinho advirtió sobre los riesgos de aceptar la propuesta de contacto físico y juego aéreo de los australianos y garantizó que la movilidad y el toque rápido de la pelota a ras de piso serán fórmulas indispensables para ganar.

  En los últimos entrenamientos, el técnico brasileño Carlos Alberto Parreira hizo hincapié en la necesidad de buscar mayor movilidad en todos los sectores, argumento que no fue exhibido en el choque que Brasil le ganó a Croacia.

  Además del aspecto táctico, Parreira tuvo que lidiar con otras preocupaciones, como el estado de Ronaldo, afectado por mareos que lo obligaron a visitar el miércoles pasado una clínica de Francfort, además del bajo rendimiento del Fenómeno ante los croatas.

  Pese a todo, Parreira confirmó a Ronaldo en la formación titular, así como al resto de los jugadores que actuaron en el debut.

  Por el otro lado, nada parece alterar la tranquilidad de Australia, ni siquiera una factible derrota ante Brasil.

  Australia tuvo que esperar 32 años para regresar a la máxima vitrina del fútbol. Los futbolistas de hoy eran niños, o no habían nacido, cuando los aussies disputaron el primer Mundial, por coincidencia en la misma Alemania.

  Ahora saben que están haciendo historia y con Hiddink en el banco ven la posibilidad de ir más lejos, aunque hoy no será sencillo ante el gran candidato.