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sábado,
15 de
abril de
2006 |
Confirman la victoria electoral de Romano Prodi
El exiguo margen de boletas que aún falta verificar no alterará el resultado a favor de la centroizquierda
Roma.- El líder de la centroizquierda italiano, Romano Prodi, aseguró ayer que el examen de los votos en disputa tras los comicios del pasado fin de semana confirmaron la victoria de su formación, L'Unione, disipando las sospechas que había levantado el primer ministro, Silvio Berlusconi. "Los exámenes (de las papeletas), como era obvio, no produjeron ninguna sorpresa y confirman la victoria (de la centroizquierda)", aseguró Prodi ante la prensa.
En un comunicado, el Ministerio del Interior afirmó ayer que todavía quedaban por controlar para la Cámara de Diputados 2.131 votos y no 43.000 como se había informó anteriormente. Con ese margen tan estrecho por controlar, las esperanzas de Berlusconi de perpetuarse cinco años más en el cargo quedaron defraudadas. Dado que Prodi, ex presidente de la Comisión Europea, cuenta con 25.000 votos más que Il Cavaliere en esa cámara, es imposible un cambio en la correlación de fuerzas.
También debían ser controladas algunas irregularidades en el Senado, donde quedaban por revisar 3.135 papeletas, en lugar de las 39.000 que se había indicado en las últimas horas. El exiguo margen de votos por controlar quitaba a Berlusconi cualquier expectativa de dar un vuelco a los resultados.
"Error técnico"
El ministerio del Interior indicó que el primer recuento provisional de papeletas se vio afectado por un "error técnico" por lo que corrigió a la baja la cifra que quedaba por escrutar. El comunicado supone una píldora amarga de tragar para Berlusconi, quien todavía mantenía esperanzas de que el recuento en la Cámara de Diputados y en el Senado cambiara las tornas.
El resultado de las elecciones de los pasados 9 y 10 de abril es el más estrecho en la historia reciente de Italia. L'Unione de Prodi se impuso sobre la Casa de las Libertades de Berlusconi por sólo 25.000 votos, equivalentes al 0,1% sobre los 38 millones de votos en la Cámara de Diputados.
Poco después de que el Ministerio del Interior diera a conocer el resultado final, Berlusconi afirmó que no tiene intención alguna de llamar a Prodi ni de admitir su derrota. "Seguimos adelante, resistimos", aseguró el magnate de los medios ante un grupo de simpatizantes reunidos en el exterior de su casa en el centro de Roma.
El primer ministro saliente aseguró que se produjo un "fraude masivo" en las elecciones y amenazó con aprobar un decreto de urgencia que permita a los jueces recontar cerca de 1,1 millón de votos invalidados.
Ninguno de sus aliados de coalición han apoyado sus reclamos de "fraude" mientras que sus rivales de centroizquierda lo acusan de minar el clima político en un intento por aferrarse al poder in extremis.
Políticos de L'Unione afirmaron su disposición a negociar con Berlusconi sobre varios puestos clave, entre ellos el del nuevo presidente de la República, en cuanto Il Cavaliere admita su derrota. El mandato del actual presidente, Carlo Azeglio Ciampi, de 85 años, expira el próximo 18 de mayo.
Mientras, la jefa de gobierno de Alemania, Angela Merkel, remitió ayer sus felicitaciones a Prodi por su victoria en las elecciones. Merkel expresó el deseo de colaborar con Prodi, señala un comunicado oficial emitido en Berlín. La canciller germana habló por teléfono con Prodi desde la isla de Ischia, donde pasa sus vacaciones de Semana Santa.
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Trago amargo. Berlusconi sigue resistiéndose a admitir su derrota.
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