Año CXXXVII Nº 49078
La Ciudad
Política
Economía
La Región
Información Gral
El Mundo
Opinión
Escenario
Policiales
Cartas de lectores


suplementos
Ovación
Salud
Página Solidaria


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 09/04
Mujer 09/04
Economía 09/04
Señales 09/04
Educación 08/04
Salud 05/04
Estilo 18/03
En el aula 18/03

contacto

servicios
Institucional

 miércoles, 12 de abril de 2006  
Elecciones en Italia. Un complicado panorama de alianzas
El futuro gobierno de Prodi ya genera dudas sobre su eficacia
Por su estrecho triunfo podría encontrarse con demasiadas trabas para revivir una economía estancada

Nicholas Rigillo

Roma. - La diferencia mínima con la que se impuso en las elecciones parlamentarias la alianza de Romano Prodi ha generado dudas acerca de la capacidad que tendrá para revivir la estancada economía italiana y enfrentar los problemas más urgentes del país.

Los resultados finales muestran que su coalición de centroizquierda tiene una mayoría confortable en la Cámara de Diputados, pero no así en el Senado. Esto se debe a que el nuevo sistema proporcional aplicado en Italia -aprobado a última hora por la administración de Silvio Berlusconi- otorga una diferente bonificación de mandatos extra a la fuerza ganadora en cada una de las cámaras.

Prodi ha dejado claro que no buscará apoyos de partidos por fuera de su actual alianza, lo que implica que su Ejecutivo tendrá que depender de un puñado de senadores independientes y de sus aliados más difíciles, como Refundación Comunista (RC).

Este partido hizo caer su primer gobierno en 1998, después de sólo dos años, por estar en desacuerdo con su programa económico. Prodi afirma que esta vez las cosas serán distintas, ya que a diferencia de lo que ocurrió hace diez años, el partido ha aprobado su programa electoral.

Pero apenas unas horas después de cerrados los comicios, el líder de RC, Fausto Bertinotti, ya estaba reclamando "más visibilidad" en vista de que su agrupación será la segunda fuerza en el seno de la alianza de Prodi -La Unión- en la Cámara de Diputados, con 5,8 por ciento de los votos.

Los analistas destacan que en la actual situación será para Prodi muy difícil aprobar las reformas necesarias en el área de flexibilización laboral y liberalización económica. "Se espera que Prodi se concentre en reducir el alto déficit gubernamental, pero por otra parte la fragmentada coalición del ex presidente de la Comisión Europea ha hecho hincapié en la reducción de la inseguridad laboral, lo que podría poner en peligro la flexibilidad en el mercado lograda hasta ahora, y eso aumentaría los costos para las empresas", asegura Lorenzo Codogno, analista de Bank of America.


Una pesada herencia
Prodi hereda un país profundamente dividido que sufre un envejecimiento de su población, un estancamiento de la economía y un enorme déficit fiscal. El Producto Bruto Interno (PBI) de Italia creció sólo un promedio de un 0,8 por ciento en los cinco años de Silvio Berlusconi en el poder.

Las empresas manufactureras se han visto enfrentadas a una competencia creciente de productos del este de Asia, la productividad no aumenta y el déficit de 2005 -actualmente del 4,1 por ciento del PIB- superará por cuarto año consecutivo el máximo del tres por ciento establecido por la Unión Europea. Además, Prodi enfrenta una serie de barreras institucionales para poder convertirse en primer ministro.

En el caso de que la centroderecha no pida más tiempo para realizar un nuevo recuento de votos, el nuevo Parlamento se reunirá el 28 de abril. El 12 y 13 de mayo, los legisladores deberán elegir a un presidente de la República, y aún no se sabe si el actual mandatario, el popular Carlo Azeglio Ciampi, aceptará ser reelegido en el cargo.

Tras la votación, el nuevo presidente mantendrá consultas para la formación del nuevo gobierno, que luego tendrá que pasar un voto de confianza en el Parlamento. Berlusconi promete no partir sin luchar y hará todo lo que esté a su alcance para dificultarle las cosas a su rival. Por el contrario, Prodi garantiza a los italianos permanecer los próximos cinco años en el cargo, aunque reconoce que "será duro". (DPA)
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo

Notas Relacionadas
Prodi se adjudica la victoria pero Berlusconi no admite la derrota



  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados