River empató con Independiente y es escolta

Buenos Aires.- Independiente y River Plate fueron tan parecidos que en Avellaneda no solamente igualaron 1 a 1 y jugaron mal, sino que hasta formaron sus defensas con los mismos nombres, como para ser similares en todo.

Los colores albirrojos de sus camisetas, la tarde soleada y una abigarrada multitud cromática le dieron marco a un espectáculo que se presagiaba atractivo, pero terminó siendo un fiasco.

El rojo, con (Lorgio) Alvarez, (Fernando) Cáceres y (Eduardo) Domínguez en el fondo, junto a marcelo Méndez, tuvo en la defensa de enfrente a (Cristian) Alvarez, (Julio) Cáceres y (Federico) Domínguez, además de Christian Tula.

Y después, cuando empezó a desarrollarse el partido, también se mimetizaron con sus faltas de ideas para llegar sobre el arco rival, la ausencia absoluta de profundidad en sus atacantes (incluido Sergio Agüero en el local) y la lucha como patrimonio de envergadura en el medio campo.

Desde el arranque, Independiente tuvo más la pelota pero no la supo administrar, en tanto River se mostró como un equipo desconcertante, que a veces parecía insinuar mucho, pero después no concretaba nada.

Dentro de ese panorama, dos equipos que siempre prometen buen juego, decepcionaron a la multitud que se congregó en el estadio Libertadores de América.

Y cuando el primer tiempo terminaba, en la última jugada desbordó por izquierda Gonzalo Higuaín a Eduardo Domínguez y lanzó un centro que Víctor Zapata conectó con un cabezazo cruzado en el segundo palo, para doblegar a Oscar Ustari por primera vez luego de tres partidos de imbatibilidad.

Este era un buen acicate para motorizar las ambiciones de Independiente en el segundo período y, consecuentemente con ello, empujar al nivel del partido hacia arriba.

Pero para desgracia del espectáculo y para beneficio de Independiente, en la primera jugada del segundo tiempo el rojo llegó al empate mediante Agüero, quien definió “a lo Romario” después de una precisa habilitación del recuperado Osvaldo Miranda, quien hoy reemplazó al lesionados Eduardo Bustos Montoya.

Esto apaciguó los ánimos y todo volvió a ser chato como en los 45 minutos anteriores (el gol del Kun se registró a los 43 segundos).

Entonces, ante la falta de creatividad y el agrupamiento de jugadores en la zona media, el juego se hizo más áspero y la pierna fuerte salió a relucir.

Se fue expulsado una vez más Federico Domínguez por golpear desde atrás a Miranda y eso desató el enojo del técnico Daniel Passarella, ya que el ex Vélez Sarsfield recibió su tercera tarjeta roja (una en la Libertadores) en el poco tiempo que el Kaiser está al frente del equipo de Núñez.

Es que este episodio ocurrió pocos minutos después que saliera Cristian Alvarez, reemplazado por Paulo Ferrari, y el chileno es el jugador que mejor se adapta a la posición de lateral izquierdo, por lo que Passarella debió improvisar a Tula en ese puesto.

Pero ni con estas deficiencias defensivas, ni con la superioridad numérica global, Independiente logró sacar partido de la situación, y acumuló ya 13 partidos sin ganarle al millonario desde 2000, con diez derrotas y tres igualdades.

Dentro de ese panorama, el rojo y los de Núñez sumaron un punto, pero en la traducción correcta del resultados de este partido, lo más atinado es decir que ambos perdieron dos. (Télam)