Presentación. Una vecina invocó la "contaminación sonora" que podrían generar

Piden que se suspendan los recitales de los Rolling y de U2

Las actuaciones están previstas para la semana próxima y los primeros días de marzo, en la cancha de River Plate

Una vecina del barrio porteño de Núñez le pidió a la Justicia que suspenda los recitales que tienen previsto dar los Rolling Stones y U2 en la cancha de River Plate por la "contaminación sonora" que podrían generar.

La presentación fue hecha por el ex juez federal de La Plata Ricardo Ferrer, en nombre de una vecina llamada Ana Paulet, que le pidió a la jueza en lo contencioso administrativo porteña Fabiana Shafrin que impida los recitales.

El reclamo apunta a que el gobierno de la ciudad de Buenos Aires "se abstenga de otorgar el permiso" para los recitales de los Rolling Stones, programados para el 21 y 23 de febrero, y los de U2, previstos para el 1º y 2 de marzo.

Fuentes judiciales señalaron que Paulet solicitó la suspensión debido a que los shows "por un lado generan mucha contaminación sonora y, por otro lado, porque ponen en riesgo las estructuras edilicias de la zona".

Una vez realizada la presentación, la jueza Fabiana Shafrin, a cargo del mencionado Juzgado, tendrá tiempo hasta el próximo lunes para tomar una decisión.

Al ser consultado Ferrer acerca del tema, el ex juez se mostró confiado en que la magistrada hará lugar a la presentación, ya que junto con el escrito se han presentado antecedentes de otros recitales realizados en el mismo escenario.

"Hay dos temas. Uno es el acústico y otro el tema de las vibraciones. Los vecinos ya hacen presentaciones desde el 2001 por las vibraciones a raíz de los festivales en River", dijo Ferrer a Radio 10.

"Ala gente se le rompe los vidrios. En los otros recitales mi clienta, junto con casi mil vecinos, hizo presentaciones en el gobierno de la ciudad. Pidió que se hiciera al menos el análisis ambiental", indicó el ex magistrado. Sin embargo, ninguno de los pedidos anteriores de la mujer tuvo respuesta, ya que "nunca le contestaron nada, ni hay constancia de que se hayan hecho los estudios mínimos necesarios".

Un caso similar se dio en Brasil, donde la Justicia de ese país desestimó un pedido para suspender el show de The Rolling Stones, en la playa de Copacabana. Pero en ese caso se trataba de un órgano de recaudación por derechos de autor, que exigía a los organizadores 470.000 dólares.


Ante el gran recital
Los Rolling Stones tocarán en forma gratuita esta noche ante una multitud que se calcula en más de un millón de personas, en la playa de Copacabana, en el marco de su tercera visita a Brasil y del inicio de la fase latinoamericana de su gira mundial "A Bigger Bang".

Protegidos por un fuerte esquema de seguridad -que incluyó a 50 agentes de la policía militarizada-, los músicos del grupo británico desembarcaron ayer en Río de Janeiro.

Mick Jagger y sus compañeros arribaron al aeropuerto de Río durante la madrugada y se dirigieron de inmediato al lujoso hotel Copacabana Palace, cuyas instalaciones fueron reformadas para atender las exigencias del grupo.

Cientos de admiradores, reporteros y fotógrafos recibieron a los músicos en la entrada del hotel, ubicado precisamente en frente al lugar de la playa donde se realizará el "megaespectáculo". Jagger fue el último en descender del ómnibus, sonriendo y saludando a la multitud. Ya instalados en el hotel, Ron Wood se asomó al balcón del último piso, desde donde pudo ver las pruebas de luz en el escenario monumental montado frente al Copacabana. Más tarde, fue Keith Richard quien apareció en el mismo balcón, para delirio de los seguidores reunidos frente al hotel.

Según la televisión brasileña, los Stones iniciarán su temporada carioca lejos del rock: para anoche, los integrantes del grupo planeaban visitar el Sambódromo, el escenario del desfile de escuelas de samba del Carnaval de Río. La etapa carioca de la gira mundial de los Stones para divulgar su CD "A Bigger Band" se realizará en medio de un gigantesco despliegue de seguridad, que movilizará a 15.610 agentes de las policías civil y militarizada.

La playa de Copacabana será escenario de una recital histórico.