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 sábado, 03 de diciembre de 2005  
Acuerdo. Aerolíneas Argentinas accedió a dar un aumento salarial y reincorporar a los cesanteados
Los aeronáuticos levantaron la huelga
Los técnicos y pilotos pusieron fin a nueve días de reclamos que dejaron unos 83 mil pasajeros varados

Los técnicos aeronáuticos y los pilotos nucleados en la Asociación del Personal Técnico Aeronáutico (Apta) y la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (Apla) levantaron ayer el paro que mantuvieron durante nueve días tras llegar a un acuerdo con la empresa. La medida de fuerza dejó varados a más de 83 mil pasajeros por la cancelación de unos 380 vuelos y causó millones de dólares de pérdida tanto a la compañía aérea como a la industria turística.

La suspensión de la huelga en demanda de un incremento salarial del 45 por ciento se produjo tras la firma de un acta acuerdo que estableció la inmediata reincorporación de los 373 trabajadores que habían sido despedidos, y un aumento salarial de unos 450 pesos para los técnicos, y de entre 600 y 1.000 pesos para los pilotos como sumas no remunerativas.

Además, se estableció un período de 90 días para negociar otras condiciones pedidas por los trabajadores, como la distribución y eventual recuperación de la flota y la futura estructura salarial. Las partes se comprometieron a "mantener y garantizar la paz social" durante ese período.

El acta fue firmada ayer a la tarde en el Ministerio de Trabajo, en un encuentro entre el titular de esa cartera, Carlos Tomada; el secretario de Transporte, Ricardo Jaime; los titulares de Apta y de Apla, Juan Pappalardo y Jorge Pérez Tamayo, y los representantes de la empresa, Martín Fernández y Mario Benard.

El acuerdo se logró luego de una negociación que encaró anteanoche el gobierno nacional, con Tomada y el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, a la cabeza, mientras que el presidente Néstor Kirchner siguió las conversaciones vía telefónica desde Río Gallegos, a donde viajó anteayer por la tarde.

Tras la firma del acuerdo, los gremialistas destacaron la "intervención directa" de los funcionarios del gobierno nacional que posibilitó "el recambio del interlocutor de la empresa y una propuesta que, por lo menos, se pudo analizar, lo que permitió la suspensión del conflicto".

Se refirieron así a la llegada del accionista de Air Comet Marsans -controlante de Aerolíneas- Gerardo Díaz, quien vino desde España para ponerse al frente de las negociaciones y participó de la reunión de anteanoche en Casa de Gobierno. El encuentro, que duró cerca de ocho horas, destrabó el conflicto.

Luego de la firma del acta en el Ministerio de Trabajo, los gremialistas se dirigieron al aeroparque metropolitano, donde comunicaron a los trabajadores sobre el contenido del acuerdo firmado minutos antes en la cartera laboral.


Hubo intransigencia
El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, sostuvo ayer que la intervención del gobierno en el conflicto de Aerolíneas permitió "restablecer la confianza y el diálogo" entre la empresa y los gremios, y destacó que hubo "una intransigencia muy grande" en las dos partes.

Tomada advirtió que el gobierno "no va a permitir el no acatamiento de la conciliación obligatoria y el cumplimiento de los servicios mínimos" en los conflictos que afecten la prestaciones públicas, al aludir a las sanciones económicas aplicadas a los gremios que llevaron adelante la huelga.

"Es un punto que no tiene que ver con sancionar a los gremios sino con el necesario respeto de las reglas de juego en el mundo del trabajo", afirmó el ministro en declaraciones a la radio porteña Spika, sobre la falta de vuelos que afectaron a unos 80 mil pasajeros.

Agregó que "el proceso de sanciones no se ha detenido", no obstante analizó que a la luz del acuerdo "habrá que ver si la situación no amerita un cambio".

El funcionario puntualizó que la participación del gobierno en el conflicto de Aerolíneas estuvo focalizada en generar "acercamiento y confianza" entre la empresa y los gremios y confió en el inicio de "una buena etapa de relaciones en Aerolíneas".

"Hubo una intransigencia muy grande de ambas partes y una huelga desproporcionada respecto de los objetivos que se perseguían", argumentó el ministro Tomada.

Destacó que era "imprescindible para la gente lograr que volviera a funcionar normalmente" la aerolínea.

"El conflicto ya había llegado a un nivel que requería de la intervención de las máximas autoridades. Y en ese marco, el gobierno logró restablecer el diálogo, que no existía", expresó el ministro de Trabajo. (Télam y DyN)
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Los trabajadores saludaron en el Aeroparque porteño.

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