Promueven cambios en la ley de las cajas de crédito

El Banco Central de la República Argentina (BCRA) fijó una nueva normativa para la operatoria de las cajas de crédito cooperativas, con la intención de remover las trabas que hoy dilatan la puesta en marcha de estas entidades y con la meta de tener al menos 10 cajas funcionando a fines de 2006.

Así lo señaló el director del Banco Central, Arnaldo Bocco, durante su participación en un seminario destinado a difundir los cambios normativos. Los requisitos exigidos por la reglamentación anterior eran tan duros que desalentaron la conformación de estos instrumentos de créditos vinculados a la economía social.

Del encuentro también participaron Enrique Fernández Quintana, del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (Inaes), el presidente de la Confederación Cooperativa de la Argentina (Cooperar) Juan Carlos Fissore y el subsecretario de Coordinación de Santa Fe, José Luis Oberlín, entre otros directivos de entidades vinculadas con el accionar cooperativo.

El trabajo del BCRA apuntó a crear consensos a la hora de fijar una reglamentación. Pero, según explicó Bocco, aún con esos cambios subsisten "muchas limitaciones" en la ley que fue sancionada en el Congreso a partir de la iniciativa del diputado Héctor Polino. Por eso, la intención es cambiar directamente la ley, sea a través de una modificación o por el envío de un nuevo proyecto. En este sentido los directivos del BCRA estuvieron reunidos hace días con los senadores por Santa Fe, Carlos Reutemann y Córdoba, Roberto Urquía, analizando la posibilidad de avanzar en una ley que contenga los lineamientos de la reglamentación que fijó la autoridad monetaria.

La reglamentación prevé pautas claras, relacionadas con la cantidad de habitantes por localidad, para la conformación del capital inicial de una caja de crédito y contempla "una mayor participación institucional.Entre los cambios que se le pretende incorporar a la ley se encuentra la posibilidad de otorgar "premios y castigos" a aquellas entidades que funcionen como cajas. Uno de los beneficios sería, precisamente, flexibilizar las condiciones de operación a las que muestren mayor eficiencia

Por su parte, Fernández Quintana precisó que "se categorizó el capital inicial en función de la cantidad de población" y citó como ejemplo a Córdoba y Santa Fe "provincias donde hay mayor cantidad de lugares con población de hasta 40 mil habitantes -categoría 5- y la normativa permite que con un capital de 100 mil pesos se pueda abrir la caja de crédito".

La actual ley establece que las cajas de crédito sólo pueden tener una casa y no sucursales, lo que limita el accionar de estas instituciones. Ante esto, Bocco explicó que el BCRA pretende "sacar rápidamente en 2006 con apoyo del Senado y Diputados, una reforma que nos permita tener sucursales y flexibilizar las condiciones que hoy son limitativas".

El directivo confirmó que hay 5 ó 6 pedidos de apertura en el BCRA y pensamos una docena más a lo largo del año próximo. "Nos veríamos altamente satisfechos si a final de 2006 tendríamos diez cajas de crédito funcionando".