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domingo,
18 de
septiembre de
2005 |
Una comerciante
peleó y desarmó
a su asaltante
En una modesta tienda de barrio San Francisquito, una mujer de 35 años forcejeó con un ladrón de 16, lo desarmó y lo inmovilizó hasta que llegaron efectivos del Comando Radioeléctrico. El menor tiene antecedentes por robo y hurto calificado y por arrebatos. El adolescente fue derivado al Centro de Alojamiento Transitorio (CAT) de Dorrego al 900 y quedó a disposición de la Justicia de Menores en turno.
Irmina tiene 35 años y vive de los dividendos que le deja su modesta tienda ubicada en Lavalle al 3100. Como todos los días ayer abrió pasadas las 8.30 esperando hacer unos mangos extras como para justificar el dormir menos un sábado. Cerca de las 10 entró al negocio un pibe. Primero le pidió ver pantalones, después se inclinó por los buzos con capucha y por último sacó una revólver calibre 22. No hubo que explicarle a Irmina que lo que sucedía era otro asalto a mano armada en su barrio.
Pero esta vez fue diferente: la mujer no se dejó intimidar por el susto y en un momento de locura extrema logró agarrarle la mano con la que empuñaba el arma al precoz delincuente. Así las cosas, los segundos se consumieron entre gritos, insultos y golpes. Los vecinos, que a esa altura del barrio están mirando de reojo para asistir en caso de robo, vieron movimientos extraños y llamaron al Comando.
Mientras tanto, puertas hacia adentro, la pelea por el control del arma estaba a punto de definirse. Y la ganadora esta vez fue la víctima. La mujer inmovilizó al joven ladrón hasta que llegaron los uniformados, quienes primero lo llevaron a la seccional 18ª, que actúa por jurisdicción, y luego lo derivaron al CAT.
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