Obra pública: lanzan incentivos para seducir a los privados

El gobierno presentó ayer dos regímenes para incentivar la participación del capital privado en las obras públicas con el fin de "dotar de todos los mecanismos posibles al proceso de consolidación del crecimiento", que requiere inversiones y creación de empleo "permanentes", según señaló el ministro de Economía, Roberto Lavagna.

Al hacer el anuncio de los dos decretos que habilitan los regímenes, en un acto del que participaron el presidente Néstor Kirchner y el ministro de Planificación, Julio de Vido, Lavagna explicó que uno de ellos contempla la participación exclusiva del capital privado y el otro apunta al financiamiento mixto público-privado de las obras públicas.

En el caso de la iniciativa privada, el régimen, que ya existía desde 1967, según recordó el ministro, fue modificado para alentar las inversiones, con menores requisitos de garantías y procesos y plazos más precisos. Este régimen tuvo "escaso éxito porque los costos de garantía que había que presentar eran sumamente altos, los procedimientos y plazos estaban indefinidos, con lo cual el privado tenía que pensar varias veces antes de hacer alguna presentación", además de que "el Estado podía ser demandado", recordó.

Además, el decreto "fija un procedimiento con plazos muy precisos", resaltó Lavagna, que indicó contempla 30 días para decidir si es admisible o no una iniciativa privada y 60 días más para el análisis de la propuesta por parte de una comisión conjunta conformada por los ministerios de Planificación y de Economía, que el presidente considerará para la decisión final.

Por otra parte, se dará preferencia "absoluta" a quien presente una propuesta con una diferencia de precios del 5 por ciento, y habrá derecho a igualar la oferta a los privados que propongas diferencias de hasta el 20 por ciento.

Según adelantó Lavagna, en los últimos meses el Ministerio de Planificación ya recibió 25 presentaciones para la iniciativa exclusivamente privada, por "montos importantes".

En tanto, el segundo régimen es la asociación público-privada para financiar obras públicas, que en Argentina "es totalmente nuevo" pero "es importante a nivel internacional", especialmente en Europa, según reseñó el ministro.

En el caso de la inversión mixta, el proceso "empieza al revés", es decir que algún organismo del Estado señalará la necesidad a la comisión conjunta de que el sector privado se integre como socio a un proyecto determinado.