Rally 2005: los valles de testigo

La competencia se realizará del jueves al domingo próximo. Los autos recorrerán caminos trabados, vados con agua y harán pruebas de altura ante miles de fanáticos

El Campeonato Mundial de Rally -que se disputará en Córdoba a partir del jueves hasta el domingo próximo- disparó la atención que la provincia mediterránea despierta entre sus miles de seguidores. La competencia mundial recorre tres de las regiones más bellas: los valles de Punilla, Calamuchita y Traslasierra. El Campeonato de Rally FIA iniciado en 1980 este año celebra sus 25 años.

El Rally comienza el jueves con la disputa de una prueba súper especial en el Complejo Pro Racing de la localidad de Malagueño (a la vera de la autopista Córdoba-Carlos Paz), en horario nocturno. Dos autos en partida simultánea recorrerán codo a codo en dos oportunidades los 3,02 kilómetros del circuito, conocido para la mayoría.

La primera etapa recorrerá tramos del valle de Punilla, donde los caminos son de montaña con buen ripio y numerosos vados con agua. El segundo día, pasará por Calamuchita, y volverá a Punilla a la tarde. La última etapa recorrerá los emblemáticos tramos de Traslasierra. El último paso se reserva la mayor altura (2.200 metros), con bajadas y subidas profundas en caminos de piedra.

El Rally de Argentina se corrió por primera vez en 1980 en la provincia de Tucumán, organizado por el Automóvil Club Argentino, después de disputar otras dos competencias de la FIA: Rally Vuelta a la América del Sur 1978 y Rally Codasur 1979.

En 1984, Córdoba fue base de la competencia y demostró contar con el escenario más adecuado para el certamen. Desde entonces se disputa en esta provincia, con excepción de la edición de 1992, que se disputó en Tucumán.

Los caminos trabados, las pruebas en altura, la cantidad de vados con agua y un millón y medio de fanáticos definen el acontecimiento con mayor convocatoria en el mundo del automovilismo.


Recomendaciones: Para asegurar el normal desarrollo de la competencia, los organizadores aconsejan lo siguiente:
Respetar las indicaciones de la policía, bomberos o Defensa Civil.

Instalarse en las partes internas de las curvas.

No ubicarse en zonas de derrapes.

Estacionar los vehículos a prudente distancia del camino.

Respetar los horarios de cierre de ruta (de dos horas a cuatro antes del paso del primer auto de competición).

Esperar el paso del vehículo de barrido con bandera a cuadros para empezar a desconcentrar el lugar.

No desplazarse por la calle o camino antes del fin de la competencia.

No colocar obstáculos sobre el camino.

No provocar mayores embalses de agua de los vados.

Ubicarse en zonas elevadas. De esta manera no compromete al piloto y deja una mejor visión.

Evitar fogones, ya que por la sequía y los fuertes vientos puede transformarse en un incendio.

No arrojar residuos no degradables a campo abierto luego de su consumo. Las autoridades de la prueba y Defensa Civil reparten bolsas de plástico para acumular los desperdicios.

En el rally del año pasado se estimó la asistencia de más de un millón de personas, las que se movilizaron en aproximadamente 50.000 automóviles, cifra que se supone será superada este año.


Paseo por la villa
Para aquellos viajeros que decidan participar del rally pueden matizar la actividad recorriendo Villa Carlos Paz. La ciudad constituye un centro turístico por excelencia debido a su infraestructura, ubicación estratégica y atractivos naturales.

En la villa se pueden realizar excursiones de pesca, cabalgatas, cicloturismo, trekking, buceo, observación de flora y fauna, parapente, safaris fotográficos, travesías en rodados doble tracción y escalada. Todo esto sumado a los excelentes servicios que brindan estancias, fincas, granjas, albergues y refugios de montaña.

Estas actividades pueden realizarse en los siguientes lugares:

uMacizo Los Gigantes: es uno de los más antiguos de la tierra. Posee refugios de montaña ideales para el descanso y excelentes palestras de piedra para practicar escalada.

uCascada Los Chorrillos: a pocos kilómetros de Villa Carlos Paz se encuentra una de las más bellas cascadas de las sierras cordobesas, la de Los Chorrillos. Se llega hasta allí desde ruta 28, a pocos kilómetros de la localidad de Tanti.

uParque Nacional Quebrada del Condorito: reserva hídrica provincial Pampa de Achala. Puede accederse desde el paraje La Pampilla, situado a 55 kilómetros de Carlos Paz, por el camino de las Altas Cumbres. Es el reservorio más oriental del cóndor andino. La quebrada de 800 metros de profundidad, constituye un escenario imponente donde la naturaleza muestra todos sus encantos.

uCamino de los Puentes Colgantes: a 45 kilómetros de Carlos Paz por el camino de las Altas Cumbres, se accede al paraje de Copina desde donde se ingresa a la derecha al llamado Camino de los Puentes Colgantes.

uCerro Champaquí: considerado el "techo de Córdoba", a 2.886 metros sobre el nivel del mar. Desde su cumbre es posible apreciar tanto el Valle de Traslasierra y el dique La Viña, como el Valle de Calamuchita y los embalses de Río Tercero y Los Molinos.


Día de campo
La opción del día de campo es una opción que suma cada día más turistas. En este sentido, Villa Carlos Paz dispone de 15 establecimientos rurales, recreativos, albergues y refugios de montaña que se ubican muy cerca de la ciudad para disfrutar de un día de vacaciones en contacto con la naturaleza.

En las estancias Cerro Blanco, La Granadilla, El Vergel, Tres Estrellas y Estancia Loca se pueden realizar cabalgatas, pesca y trekking, entre otras actividades.

Una opción más extrema la constituyen los refugios de montaña como La Posta del Qenti, refugios del Club Andino y Estancia Cerro Blanco.

Los interesados en propuestas diferentes pueden visitar un criadero de langostas de agua dulce (hayke), efectuar excursiones alternativas en Eco Safari, turismo minero en la finca Aguila Blanca, un museo de tractores con máquinas y herramientas que rescatan los procesos productivos del campo y granjas ecológicas con huertas orgánicas y viveros aromáticos.

Los competidores hacen su pasada por los caminos serranos frente a un público enfervorizado.