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 domingo, 10 de julio de 2005  
Doble tragedia. La ciudad bonaerense de Lincoln, sacudida por siniestros fatales
Dos colectivos y un auto chocaron con tren: 2 muertos y 57 heridos
El accidente ocurrió poco después de que se produjera un incendio en un hospital, donde fallecieron tres jubilados

La ciudad bonaerense de Lincoln quedó enlutada ayer por una doble tragedia en la que tres ancianos murieron al incendiarse un hospital y dos personas fallecieron y 57 resultaron heridas al chocar dos micros y un automóvil contra un tren.

El cuartel de los bomberos voluntarios de Lincoln se encontraba en paz como la mayoría de las madrugadas cuando sonó el teléfono y el bombero de guardia recibió el pedido de ayuda porque se estaba incendiando el hospital de Arenaza, un pueblo de 2.000 habitantes situado a 35 kilómetros.

Inmediatamente el cuartelero hizo sonar la alarma para despertar a sus compañeros voluntarios y comenzó la rueda de llamados de alerta por handy. Así comenzaba una de las jornadas más trágicas del partido de Lincoln.

Las tres dotaciones de 18 bomberos llegaron a los pocos minutos a Arenaza y se sumaron a sus colegas del cuartel local y el de la vecina localidad de Robert, que luchaban contra las llamas que afectaban todo el edificio del hospital municipal Pedro Lacau.

"El fuego se había generalizado. Las llamas ya estaban en el techo colonial y se introducían entre las tejas y la pinotea de las dos aguas, lo que dificultaba la tarea de extinción" relató el jefe del cuartel Lincoln, Fernando Sanz.

De acuerdo con los primeros peritajes, el incendio se había originado por una estufa de cuarzo que prendió fuego prendas de vestir en el pabellón geriátrico, donde se encontraban diez ancianos durmiendo.

Los primeros bomberos en llegar al siniestro lograron evacuar a siete de los abuelos que presentaban un cuadro de principio de asfixia y la peor noticia llegó cuando, tras combatir el fuego, se hallaron tres cadáveres.

Angela Rodríguez, de 78 años, y Benjamín Gerez, de 74, habían muerto asfixiados por el humo del incendio, mientras que Marcos Ferreira, de 80, falleció carbonizado por las llamas.


Una nueva emergencia
Cuando los voluntarios removían los escombros para evitar que resurjan nuevos focos y comenzaban a relajarse lamentando el fallecimiento de las tres personas, un llamado de emergencia los alertó acerca de un grave accidente en la ruta 188.

La cerrada niebla que impedía la visión a los conductores de los autobombas y el peligroso cruce de las vías con la ruta 188 les hizo vaticinar a los bomberos voluntarios que su tarea no iba a ser fácil.

Al llegar al lugar comprobaron que dos ómnibus de pasajeros y un automóvil habían chocado contra un tren cerealero, que se encontraba detenido en el lugar con cuatro de sus vagones descarrillados.

Junto a bomberos de la policía bonaerense de los cuarteles de Junín, Vedia y General Pinto comenzaron a rescatar a los heridos de entre los hierros retorcidos de los vehículos.

Todo había comenzado cuando un micro de dos pisos de la empresa Pullman General Belgrano -el interno 47 que desde Buenos Aires se dirigía hacia General Villegas-, colisionó contra los vagones del tren de la empresa Ferroexpreso Pampeano que circulaba descargado.

Como consecuencia del impacto una pasajera que viajaba en los primeros asientos salió despedida y el chofer, identificado como José Torello, de 36 años y oriundo de la Capital Federal, murió en el acto.

Luego, los bomberos hallaron muerta debajo de los vagones del tren descarrilados a la mujer que fue identificada como Ana Minuto, de 55 años, esposa del juez de Paz de la localidad de Ameghino.

A raíz de la colisión, la formación ferroviaria detuvo la marcha y fue embestida por el interno 210 de la empresa T.A.C que había partido de Mendoza, había hecho una parada en General Villegas y se dirigía a Retiro.

Cuando el tren había sido chocado desde los dos lados, un automóvil Peugeot 504 gris, conducido por Carlos Gatica y en el que viajaban su esposa, Silvana Magallanes y sus dos hijos menores de edad, chocó contra el T.A.C.

La mujer resultó con lesiones graves, su esposo con heridas leves y los chicos ilesos, de acuerdo al informe médico.

De los 57 heridos, 15 están en grave estado de los cuales tres corren riesgo de muerte, según los informes médicos del hospital local.

Cuando la ruta volvió a ser despejada, a las 14, los bomberos volvieron a sus cuarteles y comenzaba el trabajo del titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 5 del Departamento Judicial Junín, Sergio Terrón.

El fiscal deberá determinar ahora si existen responsabilidades entre las autoridades del hospital de Arenaza, por un lado, y de quien fue la culpa de multiple choque en el cruce que no contaba con barreras, chicharra, ni luces que alertaran el peligro, por el otro. (Télam)
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El ómnibus que participó del choque. El chofer murió.

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