Lso espera el Apertura y la Sudamericana

Canallas y leprosos ante la difícil tarea de jugar dos torneos

La historia dice que es casi imposible hacer doblete, pero...

Gustavo Conti / Ovación

La clasificación a las copas sudamericanas trae alegrías pero también responsabilidades mucho mayores. La adrenalina crece a la par de una planificación mucho más detallada y en la mayoría de los casos la historia indica que los clubes se ven obligados a elegir, con honrosas excepciones. Newell's y Central están a las puertas de una temporada repleta de expectativas, que los obliga a pensar en dos torneos a la vez. En el próximo semestre será el Apertura y la Sudamericana, y en el siguiente el Clausura y la Libertadores. ¿Hay que preparar el plantel para jugar todo? ¿Habrá un equipo alternativo? ¿Se fijará la meta al comienzo o se irá modificando con las circunstancias? Temas que los flamantes entrenadores, Juvenal Olmos y Ariel Cuffaro Russo deberán tener muy en cuenta.

Todo indica que ambos DT pondrán todo de entrada en ambos frentes. El Apertura 2005 se iniciará el 5 de agosto, la Sudamericana el 18 con el clásico, así que no hay margen para especular. El que pierda deberá apuntar todos los cañones al torneo casero, pero llevará la carga de la derrota en el clásico, para la cual deberá estar lo mejor preparado posible, porque no se puede dilapidar todo un campeonato en dos partidos. Y el ganador se las irá arreglando.

La historia del primer semestre 2006 es distinta, mucho más exigente por el Mundial. El calendario comenzará a fines de enero y el calendario será más apretado, lo mismo para la Libertadores, donde todos jugarán un mínimo de seis partidos.


Excepciones a la regla
Aquel penal que desperdició Fernando Gamboa en el Morumbí ante San Pablo privó a Newell's de entrar en la historia grande, no sólo por obtener por primera vez la Copa Libertadores de América sino porque se hubiera transformado en el único equipo argentino en conseguir esa copa y un torneo local al mismo tiempo. Su consuelo es que fue el único finalista que se consagró en un campeonato doméstico a la vez, como lo hizo en el Clausura 92.

El entonces equipo de Bielsa trató de poner siempre lo mejor, excepto cuando el calendario se le superponía, y le fue muy bien. Cuando terminó la Copa con la frustración de la derrota, Newell's no se cayó en el tramo final del Clausura y lo ganó antes de jugar la última fecha. Pero el caso de Newell's del 92 es una excepción que confirma la regla, la que sostiene que es muy difícil pelear en los dos frentes con las mismas armas.

Sin considerar aquellos torneos sudamericanos que se dirimieron en un partido, como las Recopa, sólo River Plate pudo alzarse con uno de ellos y un certamen local a la vez. Fue en el 97, cuando ganó la extinguida Supercopa y a la vez se coronaba en el Apertura 97. Después, nadie más. Cuando los millonarios obtuvieron la Libertadores 96, el campeón del Clausura 96 que se disputaba a la vez fue Vélez y los de la banda finalizaron 14º.


En torneos cortos
El citado caso de Newell's 92 o River 97 vale para toda la historia, pero se dieron en torneos cortos, los que la AFA instauró desde julio del 91 en adelante. En ese lapso, los demás ejemplos demuestran que no pudieron repetir éxitos al mismo tiempo.

En Boca multicampeón de Bianchi ganó la Libertadores 2000 y fue 7º en el Clausura 2000, ganó la misma copa en 2001 y fue 3º en el Clausura, y repitió en el 2003 y a la vez fue subcampeón de River en el Clausura. Los xeneizes fueron finalistas en el 2004 y subcampeones de River en el Clausura y ganaron la Sudamericana 2004 en el segundo semestre, pero terminaron octavos en el Apertura 2004.

Otro campeón copero fue Vélez. En el 94 de la Libertadores, terminando 18º en el Clausura de ese año, y en el 96 de la Supercopa, donde fue 13º en el Apertura 96. Y San Lorenzo también ganó: la Mercosur 2001 (5º en el Apertura) y la primera Sudamericana, la del 2002 (9º en el Apertura).

Y por supuesto, también Rosario Central obtuvo una copa, la Conmebol del 95, pero en el Apertura terminó apenas 10º, llegando además a la final del 96, finalizando 5º en el Apertura. Y en las numerosas veces que intervino en copas no le fue bien en el país (ver aparte). Además, Lanús obtuvo la Conmebol 96 y fue digno 3º en el Apertura, y Talleres se quedó con la última edición del 99, donde quedó 5º en el Apertura.


En torneos largos
Desde que empezó la historia de la Copa Libertadores, de 1960 en adelante y hasta la temporada 90/91, donde los campeonatos argentinos eran largos (aún con variaciones), tampoco varió el concepto. Los campeones coperos de estas tierras no pudieron repetir a la hora de jugar en casa.

Hubo años exitosísimos para algunos clubes pero ganaron títulos en simultáneo. Por ejemplo, River Plate se coronó en la Libertadores 86, que comenzó varios meses después de que obtuviera el título 85/86, el primero de AFA que se disputaba por temporada y no por año. Otro caso es el de Argentinos Juniors. Dio la vuelta en el Nacional 85 y pocos días después iniciaba el camino que lo consagraría en la Libertadores 85. Pero fueron los únicos ejemplos. Después ningún campeón, o finalista de alguna copa, daría la vuelta olímpica en el mismo año o temporada.

Racing ganó la Supercopa 88, en junio de ese año, justo cuando terminaba la temporada 87/88 donde fue 3º. Boca la ganó en el 89, a fines de ese año, y peleaba entonces arriba en la temporada 89/90 que culminó tercero.

Los otros casos fueron de campeones de Libertadores y se resumen así (entre paréntesis, la posición de los campeonatos que disputaban a la par): Independiente 64 (subcampeón del Metro), 65 (12º del Metro), 72 (11º del Metro), 73 (5º del Metro), 74 (5º en su grupo) y 84 (eliminado en cuartos del Nacional); Racing 67 (perdió la final del Metro); Estudiantes 68 (perdió la final del Metro), 69 (3º en su grupo del Metro, clasificó al Nacional) y 70 (16º en el Metro); y Boca 77 (4º en el Metro) y 78 (2º en el Metro y no pasó el grupo en el Nacional).

Y los que perdieron finales de Libertadores en esta época tampoco disfrutaron en el plano local: Boca 63 (4º en el Metro), River 66 (subcampeón del Metro), Estudiantes 71 (13º del Metro), River 76 (5º en el Metro), Boca 79 (4º en el Metro) y Newell's 88 (12º en la temporada 88/89).

En la temporada que se fue, Julio Falcioni hizo dos planteles con Banfield, fue subcampeón local y perdió en cuartos de la Copa. El ejemplo vale pero, como se vio, no es común. La pregunta es: ¿Newell's y Central deberán también partirse en dos? La historia dice que sí pero la seducción de lo que hay en juego quizás pueda más. Pronto se sabrá.

Newell's y Central deberán multiplicar esfuerzos en el próximo semestre.